Martín con toda la Furia (Foto: Ann Kermanns – fan page Facebook)

Unos de los referentes de los recordados Jesus Martyr, Martín vive desde hace años en Bélgica donde ha logrado -con mucho esfuerzo y trabajo- hacerse un lugar como productor, ingeniero de sonido, operador en vivo y casi todo lo relacionado con el detrás de escena de bandas que van desde Destruction pasando por los legendarios Flotsam And Jetsam hasta llegar a producir el último disco de las reformadas Nervosa. Mientras tanto, sigue apostando a su faceta musical hoy repartida entre Furia, su proyecto propio y Bark, una interesante propuesta que acaba de lanzar su tercer álbum de estudio, “Written In Stone” y que le debe tanto a Sepultura como a las tendencias contemporáneas… De todo esto y mucho más hablamos con Martín, y a continuación les dejamos las idas y venidas de una charla más que interesante.

Desde el punto de vista musical, para mí el disco parece pararse dentro del metalcore o groove metal, principalmente desde las voces y de los breakdowns pero sin ser una copia… ¿Cómo lo definís vos?

Para mí Bark (N. junto a Martín están Ron Bruynseels en voces, Toon Huet en guitarra y los Van der Straeten, Jorn en bajo y Ward en batería) es una banda de metal. Si bien confluyen un montón de géneros diferentes -punk, hardcore, thrash, death, heavy- para mí el sonido es definitivamente metal. Esa es la definición que más me gusta porque incluye todo lo anterior.

Una particularidad que tal vez es identificable para los oyentes sudamericanos es que la cadencia de Ron al cantar recuerda a Max Cavalera -incluso en “To The Grave» me recuerda a Max cantando «Orgamastron»- lo que le da ese toque sudamericano a la banda. ¿Es Sepultura una influencia también?

Sepultura es por supuesto una grandísima influencia de la banda, a nivel sonoro y profesional. Personalmente fue la banda que me empujó a dedicarle la vida a esto. Nunca me voy a olvidar la impresión que me causó verlos por primera vez, me hizo dar cuenta de que se podía ser un músico de metal en Sudamérica y decidí ir por ese camino.

Bark modelo MMXXI (Foto: Federico Solari)

EL PERRO, EL PATO Y EL ESPAÑOL

Una curiosidad es que el disco empieza y termina con una frase en español. ¿A qué apunta eso?

Es una cosa que hacemos desde nuestro primer álbum. Nuestro Dios Perro, que está en todas las tapas y es un poco el alma de Bark, habla en español y tiene la voz del Pato Larralde.

Precisamente en «Im a Wreck» invitaron a Pato Larralde. ¿Qué opinan de Sauron y de Los Antiguos tus compañeros de banda?

El Pato es una persona que amo, respeto y admiro. Su voz y su personalidad me llegan muy profundamente y con el tiempo hemos forjado una amistad. De alguna manera lo quise homenajear invitándolo a expresar ciertas palabras que tienen que ver con el espíritu de las canciones. Lo hicimos en el primer disco, en el segundo, en este último y si él sigue honrándonos aceptando nuestras invitaciones, siempre estará. Le mostré a la banda Los Antiguos y Saurón y a todos les gustan mucho.

CELESTE Y BLANCO Y NEGRO Y ROJO Y AMARILLO

Desde afuera Bélgica no es una plaza muy conocida para la música pesada. ¿Cómo es la escena ahí?

La escena es muy fuerte, hay muchísimas bandas muy buenas y muchos lugares para tocar, Amberes es una ciudad muy musical, hay de todo y muy bueno, me siento afortunado de haber encontrado un lugar en su escena. Tenés muchos festivales y grandes bandas como Aborted, Channel Zero, Evil Invaders, Your Highness, King Hiss, Carnation, Mordkaul y miles más.  Por supuesto ahora las cosas están muy paradas por la pandemia, pero sin dudas va a volver con todo en cuanto pase.

Estuviste metido en la composición del disco no solo en la parte musical sino también en las letras, donde hay una fuerte crítica al sistema en que vivimos. Teniendo en cuenta que sos argentino pero vivís desde hace un tiempo largo en Bélgica, ¿qué cuestiones resultan criticables en Europa que tal vez en Sudamérica no son tenidas en cuenta o encuentran otras prioridades?

En la Argentina y Sudamérica en general tenemos un montón de cosas maravillosas y un montón de cosas de mierda. En Europa es igual; la vida en Bélgica es sin dudas un poco más tranquila en ciertos aspectos. Para mí venir de una ciudad como Buenos Aires y terminar en Amberes que es mucho más chico y tiene el diez de la población fue un cambio enorme, algo que al principio sentí mucho. Los problemas son los mismos que en todos lados: corrupción, racismo, abuso de autoridad, manipulación, depresión, alcoholismo… el ser humano es el problema y la solución.

En “Mass Lobotomy” critican la sociedad contemporánea, especialmente las redes sociales, la clase política y los medios de comunicación que “parecen construir una realidad paralela”. ¿Qué visión tenés de esa cuestión?

Creo que la manipulación de las personas para hacerlas funcionales a un sistema que las perjudica es un problema grave. La sociedad se está volviendo cada vez más imbécil. Cada vez más, nos peleamos entre nosotros por cuestiones políticas, por opiniones, por cualquier cosa, mientras los que se encargan de tomar decisiones que te impactan muy fuerte y te perjudican se te cagan de risa y te distraen. Te polarizan con medios de comunicación creados especialmente para formarte una opinión que hoy puede ser una y mañana la contraria. Le pagan a un imbécil para ponerse adelante de una cámara para decir cualquier cosa y al día siguiente decirte lo contrario sin que se le caiga la cara. Es muy quemante ver televisión, ver informativos, todo eso es muy perjudicial.  Un canal de noticias las veinticuatro horas no tiene sentido. Lo mismo uno solamente de deporte. Generan un contenido nocivo. Tener las veinticuatro horas de programación con un solo tópico es una invitación a decir cualquier cosa con tal de rellenar espacio y generar contenido con chismes, rumores, mentiras. Es basura para el espíritu de las personas.

EL SONIDO Y LA FURIA

Hace un tiempo habías armado Furia, tu propia banda en la que incluso cantabas. ¿En qué quedó eso? Se te notaba muy divertido en el proyecto…

Se mantiene “ahí”. Es un proyecto que va muy tranquilo, los que tocamos en Furia (N. además de Martín, están Toon Huet en guitarras, Jan Rammeloo en bajo y Pieter de Ridder en batería y ya tienen tres EPs, «Nameless», «Phenomenon» y «Noumenon») estamos todos muy ocupados y es difícil llevarlo como una banda normal, vamos a seguir grabando y sacando EP’s y tocaremos cuando podamos. Furia comenzó con unas cuantas canciones que tenía para lo que hubiese sido un cuarto disco de Jesus Martyr, ahora tomó una personalidad diferente porque los músicos con los que armamos el proyecto también componen. Es una banda muy divertida para nosotros porque no tenemos ninguna presión de ningún tipo, tenemos un montón de canciones nuevas que ya vamos a grabar y lanzar.

Ya que hablás de Jesus Martyr, en Argentina se te relaciona mucho con la banda principalmente porque fue uno de los pocos grupos que a finales de los noventa estuvo muy cerca de dar un gran salto internacional. Después de tantos años de vivir afuera y de tener tanta experiencia de laburo con bandas tan distintas, ¿qué balance hacés de esa historia?

Fue maravilloso, Jesus Martyr es LA banda de mi vida. Me enseñó mucho y me dio mucha experiencia, me formó como persona y como profesional. La hermandad que tengo con los chicos se refuerza con el paso del tiempo. Me considero muy afortunado de haber sido y ser parte de esa banda. Si bien para muchos no dimos ese “gran salto”, para nosotros cumplimos todo lo que queríamos e hicimos las cosas como quisimos, lo cual nos trajo bastantes problemas… (Risas).

Desde hace largo tiempo venís trabajando como productor, ingeniero de sonido, operás sonido en vivo e incluso ahora estás como tour manager. ¿Qué desafíos implica para vos cada puesto?

El desafío es siempre el mismo, hacer que el artista llegue a su objetivo de la mejor manera posible. Como productor es ayudar a encontrar el sonido, el mensaje, el arreglo, la estructura de la canción y el disco para expresar lo que el artista quiere. En algún punto es interpretar lo que tiene en la cabeza para que suene de esa manera en los parlantes. No es sólo eso, también buscar el estudio, administrar los tiempos, llevar las sesiones y un montón de cosas más. De todos los trabajos es quizás el que más me gusta. Me encanta hacer sonido en vivo también y lo disfruto mucho, porque tiene una inmediatez y una adrenalina que el estudio no tiene. Ser tour manager está OK, pero no es el trabajo que más me gusta, la verdad es que lo hago porque las bandas con las que trabajo me lo piden porque confían en mí.  Hay que estar en muchos detalles y requiere muchísima responsabilidad, algo que a veces me rompe un poco las pelotas, pero da una gran satisfacción cuando el trabajo está bien hecho y todos están contentos.

EL QUINTETO DE LA FURIA. ¡Elegimos cinco discos donde trabajó Martín y lo invitamos a elegir un bonus track!

NERVOSA “Perpetual Chaos”: Es un disco muy importante en la carrera de la banda y para Prika (N. Amaral, guitarrista y líder) principalmente, después de todo lo sucedido (N. La banda se desintegró y tuvo que rearmarla). Trabajo con Nervosa desde hace cuatro años como sonidista. Había trabajado con ellas en “Downfall Of Mankind” por lo que Prika conocía mi forma de  ser y trabajar; siempre fue muy generosa conmigo, siempre creyó en mí, apoyó muchísimo mi carrera en todo y es una persona que quiero, respeto y admiro mucho. Artísticamente el disco tenía que ser el mejor de su carrera, tenía que ser un nuevo comienzo y a su vez respetar la personalidad de la banda. Fue una experiencia maravillosa, estuvimos un mes encerrados en el estudio Artesonao de Málaga donde había hecho ya dos discos ahí con la banda Thyrant. Amo ese lugar y toda la gente que rodea al estudio. Para la banda era la primera vez que se encontraban, no habían tocado nunca juntas, era todo muy especial y diferente. Mi aporte fue tratar de coordinar toda esa emoción y creatividad y hacer que las artistas rindieran al máximo a pesar de ser una situación inusual y de tener ciertamente una presión importante. Todas son super talentosas y trabajadoras y fue muy emocionante ver el disco crecer día a día y sentir que sin duda era el mejor disco de la banda y que llevaría a Nervosa a otro nivel. Me alegra muchísimo por ellas, especialmente por Prika, porque sé que no fue fácil estar en su lugar y supo reinventar la banda con mucha pasión, honestidad e inteligencia. Este es sin dudas el disco más importante de mi carrera y lo será para siempre, porque era un desafío grande y lo hicimos muy bien. Siempre voy a estar agradecido de formar parte.

AVERNAL “Tzompantli”: Discazo. Solo lo mezclé. Fue una gran alegría cuando me contactaron para ofrecerme la posibilidad de mezclarlo. Soy fan de la banda y ellos son hermanos de la vida. Recuerdo con mucho cariño la mezcla de este disco, el amor que le puse por ser una banda de grandes amigos. La propuesta era “superar” el ya excelente “La Quimera De La Perfección”. Mi aporte particular fue el timbre de la guitarra, algo que hice aquí en mi estudio. Después en la mezcla la idea era tratar de hacerlo sonar grande, oscuro, maligno, imponente y amenazante, sin muchos artificios, que tuviera un sentimiento de show en vivo. Creo que lo logramos y soy muy feliz de ver que el disco tuvo una gran repercusión.  Se merecen todo lo bueno, por ser una gran banda y excelentes personas.

DRAGONAUTA “Cabramacabra”: Mi primer disco como productor.  Llegué a ellos por intermedio de Hugo García, quien en ese momento llevaba el sello Días De Garage. Ya había masterizado el split con Abdullah, grabamos un ensayo y nos sentimos todos a gusto, así que fuimos a grabar el disco. Es un disco muy especial para mí porque fue el primero; en lo musical no aporté nada porque ellos estaban al re-palo, super ajustados y sabían exactamente lo que querían tocar, sólo fue grabar y disfrutar. Mi aporte como productor fue principalmente en las voces, hicimos mucha producción y tuvimos unas sesiones de grabación excelentes con Federico Wolman, quien después de eso se transformaría en un entrañable amigo. Hace poco lo escuché de nuevo y me gustó mucho, fue un disco muy artesanal. Grabamos las baterías en La Plata, en el estudio de Fede Genazzi, quien luego tocaría en la banda Buffalo. Después las guitarras y el bajo en la sala de ensayo de ellos con un micrófono, las voces en el living de la casa de Fede con un micrófono prestado… Yo iba con la computadora a todos lados. Recuerdo muy vívidamente todo. Recién comenzaba a grabar y noto mis limitaciones, hoy haría muchas cosas de otra forma, pero está muy bien como está y con el tiempo el disco toma más dimensión. Creo que es uno de los mejores discos de metal de la Argentina y tuve mucha suerte de formar parte de él.

DESTRUCTION “Born To Thrash (Live In Germany)«: Solamente mezclé el show, grabado en vivo en el Festival PartySan donde regulé los niveles de grabación. La mezcla corrió a cargo de VO Pulver que hizo varios discos en estudio con la banda. Es un gran disco en vivo, el show fue excelente, ¡aunque en el momento no lo disfruté mucho porque había un viento infernal y no escuchaba nada desde la cabina! (Risas). Mi satisfacción es haber sido parte de un disco de una banda legendaria con la cual tengo el honor de trabajar y son mis amigos. También sé que el disco no tiene ninguna sobregrabación ni absolutamente nada de los trucos que usualmente se usan en muchos discos “en vivo”. Destruction son leyendas.

BARK “Written in Stone”: Para mí es el mejor disco de la banda.  El mejor compuesto, mejor arreglado y tocado. Todos estábamos con muchas ganas y en buen nivel. Veníamos de un año complicado por el alejamiento de uno de los miembros originales y gran amigo, Rui Da Silva, y encontramos mucha fuerza renovada por la entrada de Toon Huet. Como todos los otros discos lo grabé yo, esta vez la producción artística la hicimos con Toon, fuimos arreglando las canciones y grabamos con tranquilidad. La mezcla fue bastante simple, tuve tiempo de buscar los timbres con tranquilidad durante la grabación y por eso a la hora de mezclar fue sólo nivelar los sonidos para que todo estuviera en su lugar. El mastering corrió por cuenta de Yarne Heylen que también masterizó a Nervosa y Avernal. Me gusta trabajar con él.

BONUS: ESKRÖTA “Cenas Brutais”: Uno de los discos que me gustó mucho hacer, lo produjimos con Prika Amaral en Sao Paulo en enero de 2020. La banda es excelente y lo hicimos todo en una semana, grabación, mezcla y mastering. Tiene ese tipo de punk/HC/Metal típicamente brasileño onda Ratos de Porão que a mí me gusta mucho.

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