COMO POR ARTE DE MAGIA: RECORDAMOS “A KIND OF MAGIC” DE QUEEN, A 35 AÑOS DE SU EDICIÓN

El 2 de junio de 1986 el décimosegundo álbum de Queen, «A Kind Of Magic», vio la luz como el soundtrack no oficial de la película “Highlander, El Inmortal” del mismo año. Plagado de hits, el disco daría lugar a la última gira de Queen con sus integrantes originales.  Tras el descomunal éxito de su presentación en el Live Aid de 1985, el cuarteto inglés tenía planeado un descanso de giras y grabaciones para retomarlas en 1987… No obstante, esa presentación renovó las energías y los planes cambiaron. En septiembre de 1985 volvieron al estudio y a las dos semanas «One Vision» estaba lista. A partir de ahí, los motores se pusieron en marcha para dar lugar al duodécimo trabajo de la banda… pero quién quiere leer este copete para siempre: ¡vamos a los datos!

LA PELÍCULA. Durante las sesiones de grabación, el director debutante Russell Mulcahy se aproximó a la banda y les preguntó si tenían interés en darle un tema principal a la película. Fue así que les contó la historia y a todos les gustó tanto que decidieron hacer el soundtrack entero. Esta era la segunda vez que Queen se embarcaba en un proyecto de este estilo, ya que en 1980 hicieron lo mismo para la película «Flash Gordon», también una aventura de corte fantástico. En este caso, los protagonistas fueron Sean Connery y Cristopher Lambert, quienes ofician de representantes de una raza de inmortales que sólo mueren si son decapitados; quien haga las veces de verdugo, se convertirá en el próximo Inmortal, con lo cual siempre hay alguien buscando matarlos… El film (cuya segunda parte se rodó en varios lugares de Buenos Aires, dicho sea de paso) no alcanzó el éxito esperado, pero se convirtió en un clásico de culto.

EL DISCO. La banda y los productores Reinhold Mack y David Richards decidieron introducirse por primera vez en el mundo de la emergente tecnología digital para la grabación de este disco,el primero que Queen editó en formato CD. No bien salió se convirtió en un éxito de ventas, entre otras cosas porque el CD tenía tres temas bonus: «A Kind Of ‘A Kind Of Magic'», «Friends Will Be Friends Will Be Friends» y «Forever» (versión en piano de «Who Wants To Live Forever»). Dos tercios de las canciones de este disco fueron usadas en la película y se lanzaron siete singles de nueve canciones que fueron compuestas. Otro dato: si bien es el décimosegundo álbum de la banda, es a la vez el primero que incluyó el título de la canción como nombre de la placa.

EL TOUR. Cinco días después de su lanzamiento, Queen comenzó la gira «Magic Tour», con localidades agotadas en cada lugar que pisaron y se estima que más de un millón de personas vieron esta gira. Memorables fueron los conciertos en el estadio de Wembley (del que surge el famosísimo disco en vivo), y especialmente aquel dado el 9 de agosto de 1986 en Knewborth Park, con una asistencia estimada de doscientas mil personas que vivirían un concierto histórico ya que sería la última presentación del virtuoso Freddie Mercury sobre un escenario junto a sus compañeros de banda: el avance de su enfermedad era inminente. En el documental «Days Of Our Lives», el baterista Roger Taylor señaló que sentía que ya no iba a ser posible que Freddie diera más shows, dando la idea de que el diagnóstico de SIDA fue anterior a 1986.

LAS CANCIONES

ONE VISION: El tema que abre el disco,es una composición de Taylor y May (letra y música respectivamente), aunque en los créditos figure todo el grupo, dado que todos colaboraron. Si bien cada integrante era celoso de sus composiciones, la idea de escribir una canción colaborativa surgió de Mercury, quien estuvo a cargo de la producción y los arreglos. Hasta este momento, todas las canciones de la banda eran acreditadas individualmente, pero esto sirvió como prueba y a partir del disco siguiente («The Miracle», 1989), los temas contarían como autores a los cuatro integrantes. Una versión remixada aparece en el lado B del single, el cual salió antes de que el disco estuviera terminado, aproximadamente seis meses antes del lanzamiento; es una de las canciones que no forma parte de «Highlander», pero sí de la película “Águila De Acero” de 1986. Las sesiones de composición fueron grabadas y utilizadas en para un documental, a pesar de que a la banda mucha gracia no le hacía tener una compañía grabándolos todo el tiempo. El coletazo energético de su presentación en el festival «Live Aid» de 1985, que los coronó como realeza definitiva del rock inglés, sirvió para infundir renovadas fuerzas y dio lugar a esta poderosa canción que es a la vez una esperanza de un mundo mejor y una oda… ¡al pollo frito!

A KIND OF MAGIC: Otra canción de Roger Taylor -que estaba prendido fuego componiendo-, en este caso surgida a partir de una línea dicha por Christopher Lambert en su papel de MacLeod. Este himno pop rock tuvo los monumentales arreglos de Freddie, quien decidió la línea de bajo, le agregó pasajes instrumentales y estuvo involucrado en la mezcla. La versión de la película es un poco diferente a la del CD; además, la que se incluyó en la edición en vinilo es apenas más larga que las dos anteriores, y se asemeja más a la versión que la banda elegía plasmar en vivo. Taylor no estuvo muy conforme con los aportes finales de Mercury ya que creía que la canción había sido reescrita cuando él estaba de vacaciones; tanto es así que la versión que aparece al final de la película es la de Roger, mientras que la de Freddie es la que aparece en el disco (!).

ONE YEAR OF LOVE. En este track nos encontramos a John Deacon como compositor, un arreglo de cuerdas y un solo de saxo de Steve Gregory –para los que no lo recuerdan, Gregory es quien toca la inconfundible intro de saxo del hitazo «Careless Whisper» de George Michael– y unos sintetizadores: lo que no encontramos son… ¡guitarras! Es una de las canciones más inusuales de Queen.

PAIN IS SO CLOSE TO PLEASURE. Canción compuesta por la dupla Mercury-Deacon, presenta una vibra Motown que acompaña el falsetto de Mercury mientras que Deacon provee samplers, sintetizadores, programación de baterías y guitarra rítmica. La canción, dicho sea de paso, no pertenece al soundtrack.

FRIENDS WILL BE FRIENDS. La dupla compositiva anterior se reune nuevamente en esta oda a la amistad que no forma parte de la película. La famosísima balada sin duda combina el talento de los productores con la espectacularidad de Mercury, con la aparición in crescendo de la guitarra de May. El dato argento: este tema se usó como cortina del clásico televisivo de los noventa “Amigos son los Amigos”, serie protagonizada por Carlos Calvo y Pablo Rago,

WHO WANTS TO LIVE FOREVER. La canción, utilizada en uno de los momentos más conmovedores de la película –cuando el inmortal protagonista toma en sus brazos a su envejecida esposa en el momento de su muerte- fue compuesta por May en el asiento trasero de un taxi, mientras se hallaba en un atasco de tránsito a tan solo 20 minutos de haber terminado de ver la primera edición de la película (!). Sorprende que en la grabación haya sido el mismo May quien grabó los teclados en vez del cantante. En la versión de la película es Freddie quien canta las primeras líneas, mientras que en el disco es el mismo Brian. Es una de las canciones de Queen más versionadas – incluso Seal, fanático de la canción, pidió ser él mismo quien interprete esta pieza tras la muerte de Freddie, en el show homenaje en Wembley.

GIMME THE PRIZE (KURGAN’S THEME). Una vez más, May aparece como compositor. La canción es prácticamente un duo entre su guitarra y la voz de Freddie. Recoge diálogos de la película, adornados por una poderosa orquestación de Michael Kamen y a la vez una vibra metalera brindada por la guitarra de May. Según comentó el guitarrista en una entrevista, tanto John Deacon como Freddie Mercury odiaban esta canción (!)

DON’T LOSE YOUR HEAD. Es la más rara y ecléctica de todo el disco; sin embargo, funciona dentro del todo. La talentosa Joan Armatrading es la vocalista invitada, mientras que Spike Edney se hace cargo de los teclados. Es, junto a la anterior, una de las únicas dos canciones de este álbum que no fueron singles.

PRINCES OF THE UNIVERSE. Este iba a ser el título original de la película aunque finalmente se convirtió en la canción principal de la misma. Compuesta íntegramente por Mercury, es la más pesada del disco y recuerda un poco las primeras épocas con su estribillo pegadizo, su epicidad y un solo de guitarra bestial compuesto por el cantante. En el videoclip, de extensa rotación en el momento, se ve un duelo entre el protagonista de la película y el mismo Mercury: mientras que el Inmortal porta su espada decapitadora, el intrépido cantante está armado con su característico pie de micrófono.