Promediaban los 60 y antes de convertirse en la refinada cantante de Velvet Underground, la bella Nico, a través de su novio de entonces, es decir el Rolling Stone Brian Jones, conoció al bueno de Andrew Loog Oldham (manager del grupo británico) y firmó con su sello Immediate Records, donde un joven Jimmy Page trabajaba como productor, músico de sesión y cazador de talentos para A&R.
Señalemos que a través de la breve carrera de Page como sesionista, aportó su particular sonido de guitarra a las grabaciones de bandas y artistas de distintos estilos y niveles de notoriedad tales como The Who, The Kinks, PJ Proby, Lulu, Jackie DeShannon, Van Morrison & Them, Burt Bacharach, el cantante francés Johnny Hallyday, Marianne Faithfull, Vashti Bunyan , Donovan y muchos otros. Resulta incluso divertido pensar en Jimmy Page como parte del single “Downtown” de Petula Clark, pero ahí estuvo nomás (para los interesados, existen varias compilaciones en CD del trabajo inicial de Page, de las cuales probablemente la mejor sea “Hip Young Guitar Slinger”), sin contar que un año después de la grabación que aquí comentamos volvería a reunirse con Jones como sesionista para grabar parte del soundtrack de la película “A Certain Degree Of Murder”, banda de sonido que también tiene su historia (la cual dejaremos para otra ocasión).
Volviendo al tema que nos ocupa, Page produjo y tocó en el único single que Nico grabara en 1965 para Immediate Records, el cual consistió en una versión de “I’m Not Sayin” del cantante folk canadiense Gordon Lightfoot, que logró un hit con la canción en ese mismo año alcanzando el No.12 en las listas canadienses. Cuenta la leyenda que de visita en París, el mítico Bob Dylan le había regalado a Nico una canción llamada “I’ll Keep It With Mine”. La rubia belleza le propuso grabar esta canción a Oldham, quien pensó que un tema midtempo (a medio camino entre uno rockero y un lento) no sería apropiado para presentar una nueva cantante a los chicos que veían el programa Top Of The Pops y le aseguró que le iría mejor grabando otro material. Cabe destacar que la canción también ha sido versionada por The Replacements, Turley Richards y The Ian Campbell Folk Group, pero esta intrigante versión -lejana al estilo musical que posteriormente desarrollaría- revela una Nico en una vena folk/pop, probablemente ignorante de lo que estaba tratando de lograr. Es difícil imaginar cómo ella percibía el carácter único de su personalidad en relación con el éxito musical. Su belleza debe haber abierto puertas, su conducta debe haber intimidado y su voz debe haber sorprendido en la escena de aquellos años. En este punto de su existencia, Nico ya había tenido pequeños papeles en películas, había sido modelo y probablemente estaba buscando otra salida creativa.
El single incluyó en su lado B (para aquellos con deficiencia etaria, recordemos que los vinilos tenían música en sus dos caras) a “The Last Mile”, canción compuesta por Page y Oldham. El futuro guitarrista de Led Zeppelin tocó una clásica guitarra de seis cuerdas en la canción, mientras que Brian Jones hizo lo propio con una de doce. El single fue relanzado en abril de 2018 por Charly Records con una tapa doble ilustrada con fotos de Gered Mankowitz tomadas en la sesión de grabación original.
“I’m Not Sayin’” fue apenas el tercer single del sello que Loog Oldham había co-fundado aquel año junto al promotor de shows Tony Calder y aunque no le fue bien, tuvo un corto promocional bastante bueno filmado por Peter Whitehead en Londres, en los West India Docks (luego transformados en la muy diferente zona de Canary Wharf, un elegante complejo de edificios y zona financiera yuppie) sitos en la isla de Dogs. Cuestión de verlo, escucharlo, paladearlo y en caso de disfrutarlo, ir ahorrando algunos dólares para comprar el single. Aquí lo tienen.
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