PACIENTE: BRUCE DICKINSON – «The Mandrake Project» (BMG, 2024)
HISTORIA CLÍNICA: No sabemos de donde lo saca, pero Bruce Dickinson, vocalista de Iron Maiden, piloto, empresario, esgrimista y escritor, se hizo el tiempo para reactivar su carrera solista. Recordemos que la misma empezó a la par de Iron Maiden, en 1990 con el disco “Tattoed Millonaire”. Luego de su salida de la banda, Bruce mantuvo una prolífica carrea solista que tuvo algunos momentos resistidos (“Skunkworks”) y otros muy celebrados (“Accident at Birth”, “The Chemical Wedding”) para luego volver a La Doncella de Hierro. Pero incluso allí, siguió sacando discos solistas, como el excelente “Tyranny Of Souls” de 2004. Muchos pensábamos que Bruce se las ingeniaría para mantener sus dos proyectos musicales a la par, pero ese no fue el caso y decidió dedicarle toda su atención a Maiden, pero siempre juntando ideas con el objetivo de, eventualmente, volver a editar un disco que solo lleve su nombre.
Así es como llegamos al 2024, 19 años después de su ultimo trabajo solista. “The Mandrake Project” es un disco conceptual, sobre el doctor Necropolis, una especia de científico loco renegado en busca de su identidad. El detalle es que este disco viene acompañado de un comic que narra esta misma historia. Claramente Dickinson, cuando diseña un concepto, lo piensa de diferentes ángulos. En cuanto a lo musical, el disco tiene una estructura en el que nos va guiando de a poco. Básicamente va creando el clima como si estuviéramos viendo una película.
En la primera mitad del disco encontramos todas canciones a medio tiempo con diferentes matices; “Afterglow of Ragnarok” es el clásico tema rockero de su etapa solista, mientras en canciones como “Many Doors to Hell” podemos oír una construcción más pop y ganchera con bastante protagonismo de parte de los teclados. Por el otro lado, en “Rain on the Graves” podemos escucharlo jugando a hacer algo sabbathero.
El disco parece ir creciendo en intensidad hasta desembocar en “Eternity Has Failed” (Una reversión de “If Eternity Should Fail” de la Doncella) y “Mistress of Mercy” donde podemos encontrar la sección de canciones rápidas del disco y en este punto, necesarias.
En la parte final encontramos la sección de canciones lentas del disco. Particularmente creo que es la parte menos interesante, pero a su vez es inevitable escuchar una canción como “Face In the Mirror” y no imaginar un estadio cantando el estribillo. Luego de la épica “Sonata (Immortal Beloved)”, casi jugando a ser H.I.M, sentimos que Bruce nos ha llevado por un viaje en el que algunos quedarán agotados y otros querrán seguir.
DIAGNÓSTICO: Leyendo las redes, parece haber mucho disenso con este trabajo, como así también con los últimos trabajos de Iron Maiden. Desde este lado, el voto es positivo. Quizás no sea el mejor trabajo para entrar en su carrera solista, quizás no sea su disco más ganchero, quizás demanda mucho del oyente, pero en estos tiempos de consumo rápido, algunos buscamos el desafío. Este disco me ha hecho volver a escuchar los discos solistas de Bruce y que, hoy por hoy, me den mas ganas de verlo a él que nuevamente a la Doncella.
Periodista especializado en música desde 2007 para medios como El Acople, Jedbangers, Rocktambulos, WYWH. Coautor del libro «Stoner Argentino» (2022). Cofundador de la productora «Convergen». Conductor del podcast «Literatura Rockera». Fan antes que todo eso.
