«A Night At The Opera», el cuarto álbum de la legendaria banda inglesa, generó la que quizás haya sido una de las óperas rockeras más épicas de todos los tiempos; si esta historia te interesa, preparate que ya mismo te traemos una decena de los datos más interesantes que rodearon a la creación de esta memorable obra de Queen.

1975: Queen está en los estudios Scorpio de Londres con Roy Thomas Baker y el ingeniero de sonido Mike Stone, grabando «A Night At The Opera»

«I see a little silhouetto of a man/Scaramouche, scaramouche will you do the fandango?»... La letra es tan iconica que tras unas pocas palabras, inevitablemente, uno se da cuenta de la canción a la cual pertenecen en un instante: la épica «Bohemian Rhapsody», de Queen, hoy de regreso a la fama gracias a la biopic del grupo estrenada este año. Mientras que esta canción o mejor dicho esta ópera rock supuestamente ha eclipsado al resto del álbum que generó su inesperado éxito, «A Night At The Opera” fue el cuarto álbum de estudio de Queen; lanzado el 21 de noviembre de 1975 por el sello EMI en Inglaterra y Elektra en EE.UU., entre sus doce temas contenía otros potenciales favoritos como «Love Of My Life» y «You’re My Best Friend». En todo sentido, no resultó un álbum fácil de idear, grabar y concretar, pero también se convirtió en una de las obras más exitosas e influyentes del cuarteto inglés. Para celebrar este nuevo aniversario de su edición, repasamos algunos hechos vinculados al making of de este clásico de la banda… y del rock de todos los tiempos.

1. LOS HERMANOS MARX INSPIRARON EL TÍTULO. Siendo fans de la filmografía de los célebres Hermanos Marx, parecía tener perfecto sentido que el frontman Freddie Mercury, el guitarrista Brian May, el baterista Roger Taylor y el bajista John Deacon nombraran su cuarto álbum a partir de una de sus películas. Efectivamente, el título «A Night At The Opera» (una noche en la ópera) proviene de la comedia homónima de los comediantes estadounidenses Marx Brothers estrenada en 1935, la misma que la banda solía ver en el estudio en los momentos de relax durante la grabación del LP. Según Taylor, el título le gustó mucho a la banda porque «Parecía encajar muy bien con algunas de las cosas que estábamos haciendo en el álbum, por ejemplo, algunas de las partes operísticas en ‘Bohemian Rhapsody’, cosas así»… Como si esto fuera poco, el álbum siguiente del grupo, «A Day At The Races» (Un día en las carreras, 1976), también tomó su título de otra peli de los alocados hermanos. BONUS: Posteriormente, se hicieron grandes amigos con Groucho Marx, hasta el punto en que el actor envió a la banda una carta elogiando su álbum «A Day…». Marx también invitó a los Queen a visitarlo en su casa de Los Ángeles en marzo de 1977 (cinco meses antes de su muerte); la banda aceptó con gusto la invitación y durante la ocasión, interpretaron «’39» a capella.

«Y sí muchachos, son 500 lucas, pero lo barato sale caro, vieron», explica Mercury ante los recelosos May & Taylor

2. EL ÁLBUM COSTÓ NO UNA, SINO VARIAS ÓPERAS. No hubo nada barato al grabar «A Night At The Opera», tanto desde el punto de vista temporal como financiero. Solamente registrar la masiva «Bohemian Rhapsody» tomó tres semanas (¡trabajando 12 horas por día!, y el resto del álbum se extendió mientras Queen trabajaba incansablemente con el productor Roy Thomas Baker. Más notablemente, el álbum costó el equivalente a U$ 500.000 actuales en 1975, lo que le valió la distinción de ser el álbum de rock más caro de la historia. Esto podría tener algo que ver con el hecho de que la banda grabó en seis estudios de todo el Reino Unido, entre agosto y noviembre de aquel año.

May en Surrey, adentro del granero, desgranando notas

3. SE GRABÓ NO EN UNO, SINO EN SIETE ESTUDIOS (!). Queen pasó un mes durante el verano de 1975 ensayando en un granero que se convertiría en el Ridge Farm Studio en Surrey. Luego, el grupo tuvo una sesión de composición y ensayo de tres semanas en una casa alquilada cerca de Kington, Herefordshire antes de que comenzara la grabación. De agosto a septiembre de 1975, el grupo trabajó en Rockfield en Monmouthshire. Para el resto de las sesiones de grabación, que duraron hasta noviembre, el grupo grabó en Lansdowne, Sarm Studios, Roundhouse, Scorpio Sound y Olympic Sound Studios; como el contrato con Trident había terminado, los Trident Studios no se utilizaron durante la grabación. La única canción del álbum grabada en Trident fue «God Save the Queen», que se había grabado el 27 de octubre del año anterior, poco antes de que la banda se embarcara en su gira Sheer Heart Attack Tour.

«OK, que quieran vengarse de mí con una canción, vaya y pase. Ahora, que me hagan posar en todas las fotos con este círculo rojo en la jeta, viejo, ya es medio un abuso es»

4. UNA DE LAS CANCIONES FUE ESCRITA A MODO DE VENGANZA. Antes de 1975, Queen luchó por sobrevivir a pesar de tener éxito con sus tres álbumes anteriores. Resulta que el problema fue un acuerdo de gestión que salió terriblemente mal. Era una realidad muy cruda que Queen probablemente se hubiera disuelto si este álbum no funcionaba. Más tarde, salió a la luz que el management del grupo, llamado Trident, estaba reteniendo dinero de la banda, incluyendo además una negativa rotunda a proporcionarle un piano a Mercury para componer música nueva. La banda luchó para liberarse de la mala relación con Norman Sheffield (en la foto, dentro del círculo rojo), su manager de entonces, y cuando tuvieron éxito, Mercury escribió un tema relatando la experiencia, titulada «Death On Two Legs (Dedicated To …)» («Muerte en dos piernas (dedicada a …») y fue una especie de vendetta mordaz. «‘Death On Two Legs’ fue la letra más violenta que jamás haya escrito», dijo Mercury, según QueenOnline.com, y agregó: «Fue tan vengativo que Brian se sintió mal al cantarlo. Nadie jamás creería cuánto odio y veneno había al cantar esa canción, y mucho menos en la letra en sí».

5. MERCURY SE LLEVÓ EL SIGNIFICADO DE LA LETRA DE «BOHEMIAN RHAPSODY» A LA TUMBA. La obra maestra de Queen, y posiblemente su canción más reconocible de todos los tiempos, es la ópera rock «Bohemian Rhapsody». Con más de seis minutos, desafió todas las convenciones. Y si bien conocemos algunas de las referencias de la canción –Scaramouche es un personaje de la tradición del clown italiano; Galileo es el famoso astrónomo y Bismillah es la primera palabra en el Qu’ran, o Corán- y existen varias teorías (a cual más demente, algo que amerita otra nota) al respecto, nunca podemos saber el verdadero significado de la canción ya que Mercury nunca lo reveló. De hecho hizo todo lo posible para evitar cualquier comentario: «Cualquier composición debe inspirar imaginación… Necesitás escuchar, disfrutar, pensar…», solía decir cuando le preguntaban al respecto. «(Bohemian…) es solo un caótico abracadabra rimado», agregaba, restándole significado. Tras la muerte del cantante, May declaró lo siguiente: “Freddie era una persona muy interesante y difícil: detrás de la máscara de un tipo frívolo y alegre, escondía inseguridad y soledad, cuyas raíces se extendían directamente desde la infancia. Creo que esta letra fue muy personal para Freddie… es poco probable que alguien entienda de qué se trata. Pero si realmente supiera su verdadero significado, definitivamente no se lo contaría a nadie. Y, para ser honesto, no tiene sentido decir de qué tratan las canciones. Equivale a su destrucción». BONUS: Para grabar «Bohemian Rhapsody», especialmente en las partes corales, Mercury, May y Taylor cantaron 180 overdubs (doblajes). Al final del proceso, ¡la cinta se había utilizado tantas veces que era transparente!

6. CON «BOHEMIAN…», QUEEN MARCÓ UN HITO EN LA HISTORIA DE LOS VIDEOCLIPS. Con su creciente popularidad, en Queen se dieron cuenta de que necesitarían un video musical para promocionar «Bohemian Rhapsody», en gran parte porque no querían aparecer en el programa de televisión británico «Top Of The Pops». Así que la banda reservó £ 3,500, trajo al director Bruce Gowers y creó un video musical en solo cuatro horas en un espacio que estaban usando para ensayar para una gira. El resultado fue un clip bastante simple visualmente , dominado por las cabezas cantantes de los miembros de la banda. Pero al igual que la canción, el corto se hizo tan popular que se le atribuye haber ayudado a impulsar la locura por los videos musicales de los 80 en MTV.

7. EL ÉXITO DE «BOHEMIAN…» SUELE RESUCITAR GRACIAS AL CINE. ¿Recuerdan esa escena en el clásico noventoso «Wayne’s World» donde Mike Myers y su pandilla cantan a coro «Bohemian Rhapsody» en el auto? Esa escena se ha convertido en un clásico del cine rockero, pero también dio paso a un resurgimiento del interés en el popular tema. Cuando la banda sonora de «Wayne’s World» llegó al No. 1 en el Billboard 200 en 1992, «Bohemian Rhapsody» también llegó al No. 2 en el Billboard Hot 100, llevando a Queen a una nueva generación de fans, tal como la biopic lo está haciendo ahora en el siglo XXI. Por otro lado, Mercury falleció de neumonía relacionada con el SIDA unos meses antes de que esta película llegara a los cines y, por lo tanto, no pudo disfrutar del sorpresivo resurgimiento del épico tema de 1975. Sin embargo, según Brian May, Mercury se despidió de este mundo completamente consciente del mundo de Wayne. «[Mike Myers] nos llamó así de la nada y dijo: ‘Hemos hecho esta increíble secuencia en nuestra nueva película, ¿podemos contar con su aprobación?’”, recordó May durante una entrevista con la BBC. Aunque estaba postrado, Mercury estaba lo suficientemente lúcido como para ver el video y otorgarle su entusiasta apoyo. May añade: “Por extraño que parezca, el humor en la escena era bastante parecido al nuestro. ¡Porque habíamos hecho ese tipo de cosas en el auto, saltando arriba y abajo al ritmo de nuestras propias canciones!”

8. MERCURY NO ERA AMIGO DEL WURLITZER. Si bien Mercury y May escribieron la mayoría de las canciones en «A Night At The Opera», entre ellas «Death on Two Legs», «Love of my Life» y «Bohemian Rhapsody», Taylor y Deacon lograron aportar al menos con una canción cada uno, incluyendo la única (pero notable) contribución de Deacon, “You’re My Best Friend” (eres mi mejor amiga), escrita para su esposa, Veronica Tetzlaff, que además fue la segunda canción y el primer single compuestos por el bajista en la historia del grupo. Mientras Deacon tocaba el piano eléctrico Wurlitzer en la grabación del tema, durante los conciertos en vivo Freddie lo tocaba en su piano de cola, citando su desdén al referirse al Wurlitzer como «pequeño y horrible».

9. TANTO EL ÁLBUM COMO “BOHEMIAN…” ARRASARON CON LOS GRAMMYS. Además de la introducción de «A Night At The Opera» en el Grammy Hall Of Fame de 2018, el álbum le ganó a Queen otro reconocimiento. De hecho, «Bohemian Rhapsody» les otorgó a los rockeros sus dos primeras nominaciones al clásico premio musical en la 19ª edición de los Grammy Awards, que incluyen la nominación por Mejor Arreglo Para Voces (dúo, grupo o coro) y Mejor Interpretación Vocal Pop por dúo, grupo o coro. «Bohemian Rhapsody» obtuvo una inducción al Grammy Hall Of Fame por su cuenta en 2004 y Queen también recibió el Premio a la Trayectoria de la Academia de Grabación en 2018.

10. HAY UN HOMENAJE A LA REINA… Y AL REY (DE LA GUITARRA). En 1974, May grabó una versión de «God Save the Queen», el himno nacional británico, justo antes de la gira para «Sheer Heart Attack», el álbum de Queen de aquel año. Tocó un piano guía que fue editado más tarde y agregó varias capas de guitarras. Una vez que se completó la canción, se tocó al final de prácticamente todos los conciertos de Queen. Instrumental, de múltiples capas y extrañamente conmovedora, con esta versión May cumpliría un sueño muchos años después cuando la interpretó desde el techo del Palacio de Buckingham para el Jubileo de Oro de la Reina en 2002; el guitarrista declaró posteriormente que interpretó la canción como un homenaje a la versión de Jimi Hendrix de «The Star-Spangled Banner». (el himno estadounidense) en el memorable festival de Woodstock.

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