PACIENTE: NOFX – “Single Album” (Fat Wreck Chords, 2021)
HISTORIA CLÍNICA: Siempre que analizo un nuevo lanzamiento de una banda con mucha trayectoria -casi 40 años, en este caso- que ha atravesado décadas de mucho cambio cultural, económico y político y que han vivido más experiencias que cualquier mortal, es difícil no poner el foco en el pasado: ¿Cómo hacer algo distinto? ¿Cómo superar una obra maestra como lo fue “Punk In Drublic” o “So Long and Thanks For All The Shoes” allá por los fértiles años 90? ¿Cómo mejorar la fórmula del sonido que NOFX tiene casi patentado y que tantas bandas imitaron después del batacazo del éxito que tanto les costó obtener? Seamos sinceros: los lanzamientos de la banda desde 2005 hasta la fecha poco importaron y hasta al fan más acérrimo de la banda les cuesta escucharlos y/o identificarlos. No porque sean malos, no porque sean de baja calidad, sino porque son intrascendentes -¡Ay!, lo que duele esa palabra en el mundillo de la música… Ahora sí, sigo-
“Single Album”, desde el nombre, es un juego de palabras tan al estilo de la banda que denota inteligencia y decadencia por partes iguales. El propio Fat Mike aseveró que tuvo intenciones de escribir un álbum doble pero como no logró hacer tantas canciones buenas decidió elegir las que más le gustaban y hacer un solo disco. Éste, su decimocuarto disco de estudio, se puede dividir en dos pilares: por un lado la música y por otro las letras. Salvo contados ejemplos, la música peca de mediosa y despliega poco para ser recordada. Las letras, en cambio, son MUY interesantes. Oscuras y profundamente personales, revisitan algunos de los cánones recurrentes: adicción, muerte de seres queridos y relaciones desmoronadas pero con una vuelta de rosca más “madura”, por decirlo de alguna manera.
El inicio con «The Big Drag»-canción que Fat Mike ya ha elegido como una de sus «canciones favoritas de NOFX», es una pista post-hardcore de combustión lenta que implora al protagonista que aproveche al máximo la vida. Sorprendentemente, el resultado es optimista pese al cóctel sonoro que la respalda. “Fish in a Gun Barrel” despliega una cadencia mas uptempo mientras contesta las preguntas que surgen cada vez que ocurre un tiroteo masivo en Estados Unidos, terminando con la línea pertinente, “Sólo un lunático vendería a un lunático un arma”: un cross a la mandíbula a la sociedad con mayor número de armas per cápita. La eterna lucha del vocalista contra la adicción/no adicción tiene lugar en «Birmingham», que relata una de las tantas historias de recaídas, pero aún más decadente. En medio de la oscuridad, sin embargo, está el sentido del humor característico de la banda, con «Fuck Euphemism» como estandarte, en la cual Fat Mike describe su primera «pelea de bar por pronombres de género» al discutir a las piñas su propia sexualidad y las categorías estancas en las que se engloban. «Linewleum» rinde homenaje a su mayor éxito, «Linoleum», y con ayuda de Avenged Sevenfold (quienes se cansaron de versionar el tema en sus giras) le da al clásico de 1994 una despedida que solo NOFX podría proporcionar, parodiándolo en una letra afiladísima y con datos bastante interesantes. La tríada final del disco compuesta por “Grieve Soto», «Doors and Fours» y «Your Last Resort» funcionan como un bloque distinto, la primera lidiando con la muerte del líder de Adolescents, Steve Soto, para adentrarse en el abuso de drogas y las sobredosis de la escena punk de Los Ángeles de los 80 y concluir con los traumas de una relación toxica fallida, mostrando algunas de las composiciones más conmovedoras que la banda ha hecho hasta la fecha.
DIAGNOSTICO: Después de haber leído la recomendadísima autobiografía “NOFX: The Hepatitis Bathtub and Other Stories» -«La Bañera de Hepatitis y Otras Historias”- donde los miembros de la banda dan rienda suelta a sus demonios y nos pasean por todos los estados de ánimos posibles, es entendible que “Single Álbum” siga por esa línea, también abordada por Fat Mike y su alter ego solista borderline Cokie The Clown. Pareciera que el apoyo musical de la banda es la excusa necesaria para que su líder exorcice los pocos demonios que le quedan por exponer. Si el resultado es bueno o malo, lo dejo a criterio de cada uno. En mi caso, lo emparento con las películas de Gaspar Noé: están buenas y bien logradas, exponen la mugre del ser humano de un modo artístico y no les importa mucho lo que los demás piensen, pero no las veo más de una vez.
Categoría 80. Psicólogo, amante de la música y los juegos de palabras. Padre de Ciro y Amancay. Baterista e hincha de Ferro. Fanático de los libros, del helado y el café. Escritor perseverante. Hombre de mar en busca del sentido de la vida.
