En una calurosa tarde de enero, estuvimos charlando un poco, vía videollamada, con Charly Agüero, integrante de la banda Ermitaños y Tristemente Célebres, entre otras. Con ventilador y bebidas frescas de por medio, y antes de derretirnos por la canícula, salió esta entretenida nota, que la compartimos con ustedes a continuación.

Ante todo, quisiera que me comentes sobre tu proyecto, Ermitaños, sobre su historia, cómo surgió…
Ermitaños, viene de hace muchos años…En el 2006, arrancó el violero, Ruja Viguerie, a armar canciones y ahí nos cruzamos. Después de tocar con algunos bajistas, encontramos a Karina Lajon, que es nuestra bajista actual y le fuimos damos forma al proyecto. En este momento estamos trabajando, empezamos a meter fechas, a mover mucho más. Estuvimos en el Circo del Horror, hicimos el Konex…y después decidimos armar otra compañía, Manicomio Freakshow, que es un espectáculo teatral perfomático muy conocido. En este show, musicalizamos los actos, hay fuego, gente que se clava cosas, de todo un poco, y mientras vamos tocando en vivo. El repertorio es variado vamos improvisando, hacemos covers y también temas propios
Me imagino que eso los debe mantener con mucha energía…
La verdad que sí, porque hay cosas que se deben resolver en lo inmediato, y la banda tiene que seguir tocando. La obra en sí es una propuesta diferente. No hay limitaciones.
Una obra de nicho…
Sí, un nicho bastante grande, hay mucha gente que gusta de ver este tipo de obras. Además con una banda, mucho movimiento de actores, más de 20 personas trabajando, hay mucho para mover.

ERMITAÑOS, LA FILOSOFÍA NUESTRA DE CADA DÍA
¿Cómo es Ermitaños por dentro?
Comenzamos a componer cosas nuevas, porque antes era un sonido más punk y ahora estamos virando al ñu metal. Empezamos a lanzar de a dos canciones, porque estamos todo el tiempo haciendo temas nuevos, y entre ellos vamos eligiendo dos que nos gustan.
¿Cómo salió el nombre? ¿Es por la carta del tarot, tiene alguna sentido espiritual?
El nombre salió casi de casualidad, porque uno se había alejado, y cuando volvió, le decíamos “ahí volvió el ermitaño”, y quedó (risas). Después nos dimos cuenta de que también tenía que ver con nuestras vidas, porque a pesar de que tenemos un montón de proyectos, necesitamos tiempo para encapsularnos, tener un tiempo de introspección…tiene que ver con lo espiritual. Le encontramos un sentido.
Ponerle nombre a la banda es como ponerle nombre a un hijo, siempre algún sentido tiene que tener...
Pasa con las letras, por más que dejes el mensaje claro, la gente lo va a interpretar a su manera, por sus vivencias, por lo que está pasando. Como por ejemplo lo que pasa con El Indio Solari que hay gente que lo entiende y otros que no; o con la técnica del papelito que usa Ricardo Mollo donde cada uno escribe una palabra y después unen todo y se divierten con el resultado…
¡Un Cadaver Exquisito! Yo lo uso con mis alumnos.
¡Para la música también sirve!
Claro, porque justamente salió del ámbito artístico. ¡Está buenísimo que se siga utilizando esa técnica! Y hablando de técnica…¿cómo hacen ustedes para componer?
Casi siempre surge de un riff, en nuestro caso componemos casi siempre los tres…por ahí Ruja tira un riff y en base a eso empezamos a laburar la canción, después invertimos los roles, pero siempre trabajando en equipo.
¡Es democrático!
Sí, no tenemos historia con eso. Nos vamos rotando, y va saliendo. Una vez que tenemos la estructura nos ponemos en modo de arreglos. Y a la hora del estudio me encargo yo un poco más de lo que es la mezcla, junto con el operador. Hacemos la producción entre los tres, pero a mí me gusta mucho quemarme la cabeza con lo que va a estar más al frente, y con lo que no. Estamos trabajando con Diego Serrano, de estudio Marili, en Temperley, y como yo también hago producción, congeniamos muy bien.
¿Están por sacar un disco?
En este momento no tenemos la idea de sacar algo como concepto de disco. La dinámica cambió mucho, antes la gente esperaba que salga el disco, se compraban el DVD o el cassette…(imagínate cuando dije casette se me cayó el DNI!)
¡El TDK con la birome!! (como el meme de Facebook).
Claro, era una dinámica distinta. Si querías escuchar algo, rebobinabas con la birome. Hoy en día es todo mucho más rápido. No está mal: es diferente. Entonces, para nosotros tirar diez, doce canciones todas juntas, sentimos que no va a ser completamente apreciado, distinto es ir sacando de a dos temas, incluso de a uno. Lo más probable es que si se sacan todos los temas de una, no los lleguen a escuchar todos. Nosotros ya tenemos cinco temas en Spotify y estamos por sacar dos más.
Hay que ir adaptándose a los tiempos que corren… corriendo siempre frente a la novedad. Debe afectar mucho a la industria de la música…
Pasa que la industria de la música impulsó un poco esto de querer todo ya. “Dame un estribillo que no llegue al minuto…a los 40 segundos!”, por ejemplo…hay bandas que sacan EPs, las compañías mismas optaron por lanzar temas sueltos. Entonces, la gente se acostumbró a eso.
Sucede que ahora con la conectividad, hay una suerte de regla que dice que si no enganchás a una persona en los primeros segundos, esa persona inmediatamente scrollea y sigue con otra cosa…
Claro, ahí se pierden un montón de cosas, en algunos géneros se perdió el estribillo, por ejemplo. Nosotros somos más a la vieja usanza. A mí me pasa, cuando estoy mostrando mis canciones, que muchas veces me piden que pase a lo que sigue… ¡imagínate si tengo que mostrar un disco entero! Si sacás un disco de 16 temas y no enganchás con el primero, seguramente no lo pasen hasta el final. En este sentido, está bueno el ida y vuelta. Si lo que hago te motiva, te alegra el día, eso está buenísimo, te sirve y a mí también, creando algo que necesitaba expresar.
Después de haber grabado y tocando tantos años, uno tiene alguna idea de lo que puede andar y lo que no.

¿Desde cuando tocás?
¡Desde los siete años! Hace poquito nomás. Bah, después de lo del cassette, no la puedo remar más (risas).
¿Están tocando actualmente?
Sí, estamos armando una mini gira y estamos por entrar de nuevo al estudio así que estamos poniendo mucha energía en eso.
El tiempo es tirano, pero no puedo dejar de preguntarte por tu otra banda, ¡los Tristemente Célebres!
¡Qué tristeza celebrar eso! (risas). Estamos bien, ahora en el verano en un impass, pero en cualquier momento activamos. La banda activa muy rápido. No va a faltar mucho. Ya vamos a estar en las pistas de nuevo.
Los estaremos viendo durante el año con tus diversos proyectos, entonces…
¡Acá, en la fábrica de Charly, de hacer canciones de chocolate!
Instagram: https://www.instagram.com/p/DFEOSqmSzP_/


Fanática de la música y de la comunicación, escucho rock desde que nací, hice radio, TV, gráfica y llevo a Ramones tatuado en mi corazón. Nerd de pura cepa, me gustan los vinilos, la literatura, las redes sociales y estoy despuntando el vicio del diseño gráfico. Soy la capitana de mi propio barco y siempre me mantengo en constante movimiento. ¿Me acompañás?