CON BLUES MOTEL Y LA CELEBRACIÓN DE SUS 35 AÑOS: «EN CADA PASO FUIMOS APRENDIENDO ALGO»

Antes de que el estilo se convierta en un cliché, Blues Motel era una de las pocas opciones de la escena local que mostraba sin tapujos la influencia de los Rolling Stones en su sonido, además de un interesante rescate del rhythm and blues y el rock más clásico. 35 años después, la banda de Tigre sigue firme y se preparan para celebrar el aniversario el próximo 4 de mayo en Niceto. Para saber todos los detalles y repasar la carrera del grupo, nos contactamos con el guitarrista Adrián Herrera para esta charla para leer con la lengua afuera.

Se viene una fecha fundamental en la carrera de la banda. ¿Como se vienen preparando? ¿Con que se va a encontrar su público?

Estamos trabajando con 45 canciones para después armar la lista definitiva. Hay varias que sabemos que la gente quiere escuchar, otras que nos pidieron, alguna que queremos tocar nosotros, alguna canción del último disco… pero la premisa fundamental es que sea una fiesta, que de principio a fin todos estén bailando, cantando y saltando.

En 2023 sacaron «Por el Aire» un disco que muestra una evolución sonora para el grupo. ¿Que significa este disco en la carrera de la banda?

Representa sobre todo una evolución en cuanto al sonido. No dejamos de tocar de la manera que tocamos, pero por ahí hay más aire que en otros discos. Hay menos instrumentación, algo más apuntado a la canción y tratamos de que se escuchen los arreglos claros, y con buen sonido. Es un disco que significó un cambio en cuanto a la manera de producir y de hacer las canciones. Primero editamos tres temas, y en este caso es la primera vez que no lo hacemos en formato físico, sino que está subido a todas las plataformas y fue una manera diferente de hacer un disco. Apuntamos a esa nueva manera de escuchar la música  y creo que que las expectativas estuvieron cubiertas.

Ya desde el primer disco comenzaron a forjar un público que los sigue hasta hoy. ¿Como recuerdan esas primeras épocas del grupo? ¿Alguna enseñanza que tuvieron en cuenta para el futuro?

Todo fue una enseñanza, en cada paso que dimos fuimos aprendiendo algo. Y si bien la exposición no fue toda la que hubiéramos deseado, nos sirvió por ejemplo, para saber como manejarnos de manera independiente, a partir del cuarto disco. Dejamos de procuparnos solo por las canciones, para encargarnos de un montón de cosas que no que no tenían nada que ver con la música; pero fue una decisión consciente y en la que notamos que nadie podía encargarse mejor de nuestra carrera que nosotros mismos. En esa época sí o sí tenías que tener un contrato firmado con una compañía discográfica, creo que los Redondos eran, en ese momento, los únicos que se manejaban de manera independiente en el país. Y fuimos quemando todas las etapas que hacían falta y en ese sentido nos sirvió.

La Tragedia de Cromañon marcó un antes y un después en los shows en vivo de las bandas locales. ¿Les costó adaptarse a los cambios que tuvo la escena post 2004?

En cuanto a los shows si, porque muchos de los lugares en los que tocábamos se clausuraron y fueron años complicados para apuntalar nuestra carrera, por lo que nos pusimos a trabajar en nueva música ese año. Nos propusimos sacar discos, generar cosas y que la banda siga en movimiento. Podríamos habernos quedado a esperar a ver cuándo volvía toda a una especie de normalidad, algo similar a lo que pasó después con la pandemia, pero decidimos seguir trabajando y generando cosas para darle a la gente. Y en ese momento nos propusimos hacer tres discos, que nos parecía que era algo que no era común. Por eso en 2006,, mientras que presentábamos un disco, ya estamos grabando otro que no tenía nada que ver, porque justamente elegimos que un disco sea totalmente eléctrico y el segundo totalmente acústico. Fue una una experiencia buenísima.

¿Qué tiene para ofrecer el rock and roll en estos tiempos de música urbana y reggaetón?

El rock and roll sigue teniendo cosas para ofrecer, porque también es una música urbana, bien de barrio, tiene sus códigos y todavia hay gente que prefiere seguir escuchando rock. Está bueno que haya variedad de ofertas y de gustos, entonces cada uno elige qué prefiere escuchar. Y el rock and roll es algo que sigue convocando, se ve mucha gente en los shows, se agotan las entradas; no va a morir y ya veremos qué pasa con otro tipo de músicas. No creo que el rock desaparezca en la Argentina. Y creo que en el mundo pasa algo similar.

Tienen anécdotas con Mick Jagger que seguro les contarán a sus nietos: ¿que nos pueden contar de ese mítico encuentro?

¡Seguramente quedarán anécdotas para contar! No estaría mal que en algún momento hagamos una especie de documental en el que contemos todo, tal cual como fue ese encuentro, para no olvidarnos el día de mañana de algún detalle (Risas) No era algo que nos propusiésemos lograr, pero fue increíble que se haya dado esto de ir al encuentro de una personalidad con la que nosotros crecimos y que nos empujó a ser lo que somos ahora. ¡Pasamos de pegar su foto en la carpeta del colegio a tenerlo a Mick Jagger ahi frente a frente charlando en un camarín! Fue todo muy sureal.

¿Como se dio ese encuentro?

Fue muy increíble, la clave fue nunca creernos que fuera algo que pudiera pasar. Si bien la gente que nos había contactado era de una productora, no teníamos de parte de alguien oficial de los Rolling Stones un contrato para encontrarnos con Jagger, ni mucho menos. Entonces hasta el último minuto parecia que no se iba a dar. Y creo que tiene un sabor especial eso y todo lo que vino después, el hecho de estar en una película de los Stones, porque fue una película, que se estrenó en cines de todo el mundo y salió en DVD donde aparecemos tocando un tema de Blues Motel, es como ponerle todo un moño al amor que seguimos teniendo por ellos.

¿Qué planes hay para el futuro?

Seguir haciendo mejores shows, mejores canciones y mejores discos. Me parece que es algo que no tiene un cierre, sino que siempre hay un montón de cosas para superarse en todos los aspectos. A mí me pasa de terminar un disco y ya estar pensando en cosas que le modificaría, porque nunca te quedas 100% conforme con algo y siempre estás enfocado en superarlo para la próxima

La última: si tuviesen que definir estos 35 años con Blues Motel, ¿que dirían?

Yo creo que pasa por el disfrute y por intentar llevarse de la mejor manera posible con la gente que formó parte de la banda. Es lo que siempre buscamos con Gaba, desde el principio; nunca pusimos un aviso buscando tal músico que toque de determinada forma. Siempre buscamos primero en el entorno, a gente con la que podíamos entablar una relación. Y llegado al día de hoy pasa eso. Fueron  un montón de años de pasarla bien, de disfrutar y tener un proyecto en común, obviamente con diferencias, pero siempre apuntando a lo que sea mejor para la banda.