LEYENDAS DEL METAL- 40 AÑOS (JERIKO/LETHAL/EL DRAGÓN/TREN LOCO/SERPENTOR)- LUNA PARK, 14/11/2022

Como estilo, el metal criollo asomó su cabeza en los albores de la década del 80, a la par del auge- el heavy no volvería a ser tan popular como en aquellos años- que el estilo vivía en el mundo entero. De ahí el título «Leyendas del Metal – 40 Años» del festival, en un intento por redondear fechas que habiliten el aniversario. La celebración tenía en suerte un día atípico. Es raro estar yendo a un show de metal un lunes. Raro también ver que el Luna Park, un recinto siempre esquivo para el género (salvo que se trate de artistas extranjeros), le abra las puertas al metal vernáculo. Con sólo trasponer la puerta de acceso, la idea de que el recinto le iba a quedar grande al show se confirma instantáneamente. El estadio no estaba habilitado en su totalidad, y unas 1500 personas decían presente, haciendo notar de inmediato que lo que faltaba en cuanto a número sería suplido con fervor.

«Digan whisky»: las bandas posan después de homenajear juntos a V8 en el último bis

Con suma puntualidad, poco después de las 20, Jeriko abrió las acciones con su propuesta con algunas reminiscencias de la NWOBHM, combinado con cierto aire powermetalero, reforzadas por el timbre vocal de su vocalista, con marcadas influencias del género. Nos referimos al debutante Renzo Favaro, quien también se desempeña como cantante en los progresivos Fughu, quien además de su buen y apropiado registro para la propuesta del grupo, se mostró suelto y comunicativo con la audiencia. Grata sorpresa fue comprobar que en cuanto a luces y sonido, la producción del festival fue generosa no sólo por su buen nivel, si no que además habría absoluta equidad para todas las bandas en ambos rubros. El set de Jeriko fue por demás correcto, y sirvió como adelanto de lo que sería una constante de todo el festival: setlist cortos conformados por temas bien arriba. Palo y a la bolsa, señores.

Marcelo Bracalente sosteniendo el sonido de Jeriko con su bajo de ocho

Luego fue el turno de los longevos Lethal, quienes ganaron las tablas comandados por Tito García, su histórico cantante, un personaje presente en la escena  metalera argenta desde la primera hora.Con “Maza”, su álbum más celebrado hasta la fecha, como columna vertebral de su repertorio para la ocasión, el hoy cuarteto volvió a demostrar que nadie sonó tan al thrash de la Bay Area como ellos. El otro prócer en las filas de la banda es nada menos que Eddie Walker, que volvió a demostrar que conviven en él tanto su pericia con las cuatro cuerdas como su histrionismo sobre las tablas. Obviamente fue Mike Tyson” la canción que se llevó todas las hurras, pero también hubo espacio “Hasta la Muerte” (2015) tema que da nombre a su última placa editada hasta la fecha

Mike Tyson finalmente llegó al Luna Park de la mano de los veteranos Lethal

El respetable despidió con aplausos a Lethal, para dar paso a Olaf Mangialavore al frente de El Dragón. Mangialavore es quizás uno de los personajes más pintorescos del heavy nacional, y la banda que lo acompañó para la ocasión estaba en también en esa sintonía. La presencia de una tecladista y una corista le aportaron una bienvenida y necesaria diversidad de género para un género, que tanto en el país como en el resto del mundo, empieza a dejar el machirulismo de lado. De todas las propuestas que sonaron en el festival, la de El Dragón sea probablemente la menos actual, y plantaron bandera con un heavy muy ochentoso, con mucha garra no exenta de ciertos problemas de sonido.

En sintonía con la propuesta, Olaf fue el músico que más arengó al público, con consignas y letras fieles a la ortodoxia metalera nacional .Un aplauso respetuoso despidió a El Dragón para darle la bienvenida a Tren Loco, quienes a lo largo de varias décadas de actividad han sabido ganarse un público muy consecuente y que se hizo notar en la noche del Luna portando banderas y alentando durante todo el set a la banda.

Los Tren Loco están transitando el duelo de haber perdido a su bajista y fundador Gustavo Zavala, un tipo muy querido y respetado dentro de la escena local. y que fue recordado por sus compañeros en varios pasajes del show de Tren Loco. La que fuera la otra cara visible del grupo, el cantante Carlos Cabral, abandonó recientemente al grupo y su reemplazante, Daniel Medina, realmente se llevó los laureles dentro de la arena de metal pesado en la que se transformó el Luna Park la noche del 14 de noviembre.

En acción: Tren Loco mostrando la solvencia de su nueva alineación en plena faena

Con un registro que calza perfecto en el sonido del Tren, Medina no erró una nota y mostró una escena y dotes de frontman que a veces brilla por su ausencia en las bandas locales del estilo. Dos temas de “Prisioneros de La Tierra” ( sí, como la película de Hugo Del Carril), el flamante disco del quinteto, mostraron un prometedor presente, mientras que clásicos como Pueblo Motoquero”, fueron la excusa perfecta para que se desatará el agite. Los trenes se componen de formaciones, y la que vimos esa noche en el palacio de los deportes porteña, se ganó los pulgares un merecido aplauso de las hordas metaleras.

Serpentor cerró el festival con toda la justeza de su thash a lo Testament

Cerrando la velada, Serpentor se apoderó del escenario con su thrash técnico y acelerado a “la Testament”. Apuntalados por la precisa labor de Marcos Gianfrancesco tras los parches, y una dupla de guitarras hiper ajustada y filosa, los thrashers de Zona Oeste aportaron la chispa para que el pogo ganase la superficie del campo del Luna. Para el final, a Serpentor se le sumaron miembros del resto de las bandas para despedir la noche a lo grande, y juntos hacer una versión de “Muy Cansado Estoy”, himno de “Luchando por El Metal” primer disco de V8 (¿y del metal argentino, quizás?), que sonó poderosa y con una letra alusiva al evento y el día de la semana en el cual transcurría (“Lunes y nuevamente/ en el trabajo estoy””).

A nivel global, el heavy metal es probablemente el género musical con mayor cantidad de festivales específicamente dedicados al mismo, pero en Argentina ese rasgo distintivo, salvo casos esporádicos, nunca dijo presente. Como ya fue dicho, la fecha del pasado 14 de noviembre, contó con una producción cuidada, en cuanto a escenografía y sonido. Quizás faltó una mayor promoción del evento y algún nombre con una convocatoria importante encabezando el cartel, factores que hubieran probablemente, aumentado la convocatoria. Quizás sea hora de que los artistas locales con más predicamento entiendan que no basta con girar exitosamente por el país, y que es hora de pensar de una vez por todas de terminar de generar una escena nacional. Por lo pronto, el balance final es positivo. El «Leyendas del Metal» fue un primer intento valiente, que tomando en consideración algunas lecciones, debería repetirse con regularidad.

Fotos cortesía Gaby Sisti Press

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