Dicen que los Ramones son argentinos, y nosotros a esta altura del partido ya lo creemos. Marky Ramone, su legendario baterista, no solo fue declarado Huésped de Honor de la Ciudad de Buenos Aires en un encuentro realizado en Strummer Bar en el barrio de Palermo – y hasta reaccionó con músicas de cantantes argentinos de moda y le gustó- sino que volvió a presentarse en el Teatro de Flores junto a su banda que a esta altura ya se encuentra sólida y desafiante: Iñaki “Pela” Urbizu en voz, cantante y compositor vasco, Marcelo Gallo en guitarra y Martín Sauan en bajo.
La velada comenzó con la presentación de Daraa, comandados por la impactante Florencia Alba y su look con dreadlocks que sorprendió al público con su fuerza y vitalidad. Entre los temas de su set, tocaron “Al Fuego Que Ilumina”, la última canción que escribió Pil Trafa para ellos y también tenía planeado grabar junto a la banda, y fue el momento emotivo de su show.
Luego todo se convirtió en expectativa con la gente coreando el típico “Hey, Ho, Let´s Go” y arengando con el “Vamooo´”, hasta un jovencito enfundado con la típica indumentaria ramonera abriendo los brazos cuando empezó a sonar la sensual “Park Avenue Beat” y se corrió el telón para inundar de rojo todo el salón, y aparecieron ellos en escena, Marcelo, Martín, Iñaki y el mismísimo Marky Ramone, leyenda viva del punk rock de todos los tiempos, empuñaron sus instrumentos y salieron al ruedo con el set más salvaje que te puedas imaginar.
Iñaki se calzó la responsabilidad de llevar adelante una banda ramonera, y cuando estaba parado en el retorno agitando con “Surfin´Bird”, hacía recordar muchísimo a Joey Ramone, hasta con su figura ultra delgada y alta. Marky siempre sorprende y quiere hacerlo de la mejor manera. Así que hizo un surtidito de los temas que estamos acostumbrados, pero rotó un poco el orden de los mismos, y de la nada salió con “All´s Quiet On The the Eastern Front”, y más festejado aún, el “Happy Birthday to You” que formó parte del capítulo El oso de Burns de Los Simpsons. Vi gente asombrada y enloquecida cantando, y me vi a mí misma en flashback hace décadas atrás cuando el canal de las pelotas había anunciado con bombos y platillos el capítulo “especial” y todos estábamos estatuados adelante del televisor esperándolo y disfrutándolo.
Lo que vino después, todos temas absolutamente cantables, “Poison Heart”, “Have You Ever Seen the Rain”, “Dont Come Close”, clásicos que sabíamos de memoria y cantamos a los gritos.
También estuvo presente “Spiderman” y “R.A.M.O.N.E.S” y “Anxiety” quizás ya en una etapa más noventosa, más cerca de la “ramonesmanía”, para acercarse al final con “Wonderful Word”, el clásico de Louis Armstrong interpretado por Joey e incluido en su disco póstumo “Don’t Worry About Me”.
Quiso la vida que el show termine arriba con el archiconocido «Blitzkrieg Bop», pero yo me quedé exactamente en el tema anterior. Con los ojos vidriosos, recordando todo lo que fue y reflexionando, acerca de los acontecimientos recientes que todos sabemos, y cómo el gran Joey nos preparó para esos momentos, cuando él mismo, enfermo y casi entregado, se seguía sintiendo maravillado, agradecido, esperanzado en la gente y pensando que así y todo, el mundo es un lugar maravilloso y tenemos que disfrutar cada momento que nos toca vivir, y fue entonces cuando se me dibujó una gran sonrisa, levanté la mirada y envié besos al cielo estrellado en medio de una calurosa y ruidosa noche porteña.
Fotos: Huberto Andrada
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Fanática de la música y de la comunicación, escucho rock desde que nací, hice radio, TV, gráfica y llevo a Ramones tatuado en mi corazón. Nerd de pura cepa, me gustan los vinilos, la literatura, las redes sociales y estoy despuntando el vicio del diseño gráfico. Soy la capitana de mi propio barco y siempre me mantengo en constante movimiento. ¿Me acompañás?