
Kraftwerk lanzó su octavo álbum de estudio en 1981, y lo tituló proféticamente: «Computer World» se adentraba en lo que la humanidad apenas comenzaba a comprender que se convertiría en un mundo de computadoras. Pero por aquel entonces, aunque para las jóvenes generaciones hoy resulte difícil de creer, la mayoría de la gente nunca había usado una computadora, o ninguna había usado una computadora más avanzada que una calculadora de bolsillo. Pero los pibes-máquina de Düsseldorf también tenían una canción para lidiar con esta contingencia: el primer single del álbum, «Pocket Calculator». Y no era solo un nombre: la calculadora programable Casio fx-501P aparecía en la lista de «instrumentos» utilizados en su grabación… si ya están calculando a dónde los puede llevar esta historia, sigan leyendo para ver qué resultados arroja.

RIESGO CALCULADO. A principios de la década de 1980, la gente estaba muy entusiasmada con las calculadoras de bolsillo (incluso, como es sabido, estaban disponibles en formato reloj pulsera) y los expertos de Kraftwerk vieron una oportunidad para su forma de música casi paródicamente impersonal. Se podría argumentar que «Computer World» de 1981 era Kraftwerk en su forma más Kraftwerkista: cada tema trataba sobre interactuar con (¿o ser?) una computadora o una calculadora, y hasta el último vestigio de un latido del corazón, del sexo y de la vida vida real que uno pudiera encontrar en “Autobahn” había sido eliminado.

TODO SUMA. “Pocket Calculator”, el primer single del álbum, funcionó bastante bien para ser un single de Kraftwerk. Fue sólo el tercer tema de Kraftwerk en llegar al Top 100 de Alemania y, por alguna razón, logró alcanzar el puesto número 2 en Italia (aquí pudo haber influido el hecho de que la banda germana se había tomado la molestia de grabar “Mini Calculatore”, una versión italiana de la canción que pueden escuchar y ver en el video aquí debajo).
PALO Y AL BOLSILLO. La canción «Pocket Calculator» contiene una referencia al hecho de que las calculadoras pueden reproducir música; la frase dice «Al presionar una tecla especial, reproduce una pequeña melodía» (en inglés, “By pressing down a special key, it plays a little melody”). Fue así que Kraftwerk encargó a la empresa electrónica japonesa Casio un artículo promocional especial, más precisamente una calculadora que podía hacer precisamente eso, «reproducir una pequeña melodía»: se trataba de una versión del modelo VL-80 de la compañía, que también era un sintetizador musical y que se bautizó como Kraftwerk Taschenrechner… No les sorprenderá, entonces, saber que «Taschenrechner» es la palabra alemana para «calculadora de bolsillo». Siendo la banda alemana, cabe pensar que sus miembros se inclinarían por la formidable calculadora Braun ET55 diseñada por Dieter Rams, pero para cuando salió «Computer World», empresas japonesas como Casio ya dominaban el mercado de la electrónica personal. Pueden ver y escuchar el modelo básico (no es la versión hecha para Kraftwerk, ojo) en este video:
NO ERA UN SINTETIZADOR COMPLETO, PERO CASI(O). Casio, una marca que en el mundo de la música se convertiría en sinónimo de sintetizadores sencillos y económicos, ya había lanzado al mercado en 1979 el VL-1, el primer sintetizador digital comercial (que incluía una función de calculadora). Con un Kraftwerk Taschenrechner, incluso las personas sin conocimientos técnicos o musicales, y mucho menos un sintetizador completo, podían crear música. Como pueden ver en la foto de aquí abajo, la propia máquina trae una representación de notas musicales impresa en el frente, justo debajo de la minipantalla… Dicho sea de paso y para ser precisos, la canción fue grabada usando un Casio FX-501P, que parece haber sido un dispositivo un poco más robusto y con mejores y más variados sonidos.

NÚMEROS MUSICALES. Kraftwerk estaba ansioso por que los fans tocaran éxitos de Kraftwerk en sus propias calculadoras, por lo que emitieron estas instrucciones especiales (bueno, sí, llamémoslas “partituras” si les place) que ven en la imagen de abajo para tocar no solo el nuevo material sino también clásicos como “Trans Europa Express”, «Das Model», «Die Roboter» y “Schaufensterpuppen” en el VL-80 que se muestra en la foto de arriba.

Las instrucciones fueron publicadas en una edición de marzo de 1982 de la revista The Face. Acá va el detalle:

En cuanto a la notación de «Pocket Calculator», aquí se las dejamos, por si acaso tienen la calculadora a mano y quieren hacer la prueba:
4599 845887 4599 845887 6
4599 845887 4599 845887 6
44284 44284 44284 44284
RECALCULANDO. ¿Se puede conseguir esta pequeña gran pieza coleccionable? ¿Y acaso funcionará? Si se están haciendo estas preguntas, sepan que hubieron y seguramente seguirán habiendo subastas de eBay donde podrán comprar un Casio VL-80 genérico (no la version promocional de Kraftwerk, peeeero… quién les dice); los precios comienzan a partir de U$ 40. En algunos de los listados se indica que las baterías no funcionan. Hoy en día, Kraftwerk sigue funcionando en el mundo informático en el que vivimos… Dado que «Computer World» está cerca de cumplir 45 años (y de ahí al medio siglo hay solo un lustro), tal vez haya llegado el momento de que las calculadoras vuelvan al escenario.
BONUS I: En una maniobra marketinera (y estética) poco menos que brillante, Kraftwerk también lanzó su single en formato cassette en Inglaterra, y el diseño del packaging parecía el de una calculadora, como pueden ver en estas fotos:


BONUS 2: Además de la versión en italiano, Kraftwerk incluso grabó versiones de «Pocket Calulator» en japonés («Dentaku»), además de versiones en alemán («Taschenrechner»; recordemos que el tema original es en inglés) y francés («Mini Calculateur»), que por supuesto les traemos aquí para que escuchen… y si tienen una vieja calculadora Casio VL-80 a mano,

Fundada por Frank Blumetti, la edición digital de la recordada revista de los 90 cuenta con colaboradores de la vieja época y nuevas incorporaciones. Basada en el gusto por la música y centrada en todas las manifestaciones de la cultura joven, esta web busca estar al tanto de lo que ocurre a diario en Argentina y el mundo y estar al día con los desafíos que las nuevas tecnologías imponen al periodismo.