El pasado jueves 18 de marzo, C.R.O- el alias de Tomás Manuel Campos, un exitoso trapero ahora devenido al rock- estrenó su flamante trabajo  “Mal De La Cabeza” en el escenario de La Trastienda, en el porteño barrio de  San Telmo, en un evento exclusivo para prensa e invitados especiales al que MADHOUSE fue invitado para contarte todo… a continuación.

C.R.O presentó su primer trabajo dentro del rock, llamado “Mal De La Cabeza”, en una noche para deleitarse con una performance para el recuerdo, entre tragos, música de fondo y una entrada amenizada por la DJ Uopanachi que se mandó unos enganches muy enérgicos, con mucho rock clásico para comenzar a crear el ambiente perfecto para el show que se venía luego.

La banda de C.R.O.-obviamente encargado de la voz- se completa con Franki Cañardo y Joaco Tdeb  en guitarras, Nikko Taranto en batería e Ignacio de Tommaso en bajo. El show duró casi una hora donde tocaron todos los cortes de ‘Mal de la Cabeza’, y alegraron al público con la sorpresa de un tema inédito que sirvió de cierre junto al simple «Por La Carretera».

Recordemos que C.R.O. hizo un cambio radical en su carrera: del trap pasó al rock, y no escatimó recursos. Respaldado por una banda potente, sus canciones suenan con fuerza y pasión. Esto lo materializan gracias a una armónica base de bajo y una bata que marca el tiempo a la perfección, mientras que se destaca la guitarra, tanto en bases como en punteos, creando sólidos pasajes musicales. Pero sin dudas, es la voz de C.R.O. la que consolida todo, yendo desde estrofas enérgicas hasta el susurro, todo acompasado con los movimientos justos para la ocasión.

Hasta aquí los detalles técnicos. Pero además de eso, es necesario hacer hincapié en el impresionante show que brindó C.R.O. junto a su banda que hace que, aquellos que vienen de mucho recital nacional o internacional de todos los palos y piensan para sus adentros que «ya hemos visto todo” o que «no hay nada nuevo para ver”, deban reivindicarse y asegurar que este artista joven tiene ese encanto que ya casi no estamos acostumbrados a ver.

Es que la performance de C.R.O. es para sentarse a disfrutar – en lo posible con un trago y todos los sentidos puestos- de un show bien hecho y bien producido, de esos en que los detalles son cuidados hasta el extremo y nada está librado al azar: las luces, el sonido y hasta el look de los artistas. Una música y un ambiente cálido pero enérgico, donde te sentís cómodo y ves que la gente en el escenario la está pasando realmente bien. Que tienen mucho para dar y emanan energía y juventud por los poros.

Personalmente veo un gran futuro en este artista -que no por nada tiene casi 2 millones de seguidores en Instagram- y va experimentando con todos los estilos de música sin encasillarse, pudiendo pasar del trap al rock sin detenerse en las etiquetas, sino simplemente siguiendo lo que su corazón le dicta.

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