
Así de entrada, asumamos un hecho: desde 1981 Joan Jett ha sido tan pero tan pero tan identificada con su célebre himno rockero “I Love Rock ‘N’ Roll”, que la mayoría de los fans, críticos, opinólogos y afines asume que fue ella quien lo compuso. Pero no: de hecho, fue escrita por Alan Merrill, cantante y bajista del grupo glam británico-yanqui Arrows. Aunque el grupo cosechó algunos éxitos, irónicamente, su “I Love…” ni siquiera rozó los puestos más bajos de los rankings británicos y podría haber caído en el olvido para siempre – eso si Jett no hubiera decidido grabarla. Hoy 9 de mayo, a 50 años del lanzamiento de la versión original de este verdadero himno rockero, te contamos cómo nació, creció, se reprodujo, vivió… y todavía vive.

EL FINAL Y EL PRINCIPIO. Por fortuna para la posteridad, los historiadores y los fans de la música, (y nosotros, que podemos escribir esta nota), en un reportaje de 2016 realizado para la web guitarplayer.com, Alan Merrill alcanzó a explayarse acerca de los orígenes de la misma. Y decimos “alcanzó” porque, desgraciadamente, falleció en marzo de 2020 a causa del COVID-19, convirtiéndose en una de las primeras víctimas mundiales de la pandemia (QEPD)… Pero empecemos por el principio: hijo de la pareja de músicos de jazz Aaron Sachs y Helen Merrill, Alan se mudó de Nueva York a Japón siendo aún adolescente, convirtiéndose en la primera estrella pop extranjera residente en dicho país en triunfar en la tierra del Sol Naciente, tanto como solista como con su grupo Vodka Collins. Posteriormente se mudó a Inglaterra, más precisamente a Londres y allí formó The Arrows, junto al guitarrista yanqui Jake Hooker y al batero inglés Paul Varley.
LA FLECHAS NECESITABAN UN BLANCO. Corría la década del 70 y los Arrows, de módica fama en Inglaterra, atravesaban una encrucijada: todavía no habían grabado un álbum, pero sí tres singles, dos de los cuales («Touch Too Much» y “My Last Night With You”) habían sido hits, aunque medianos; por ende necesitaban pegarla con algo más grande para poder seguir adelante. Como lo contaba Merrill, “Arrows necesitaba un cuarto single, y Mickie Most, nuestro productor y dueño de nuestro sello [RAK Records], nos pidió que compusiéramos un himno rockero simple, de tres acordes, al estilo de ‘Summertime Blues’ o ‘Wild Thing’… Ah, y necesitaba un riff potente y un estribillo contagioso, pero la estrofa tenía que ser melódica. Lo encargó como si fuéramos sastres»
¿LOCO, NO TE SOBRA UNA MONEDA? Fue así que Merrill respondió a la petición de Most con “Shake Me”, una canción rockera de tres acordes similar a “I Love Rock ‘N’ Roll”, pero el productor la rechazó (aunque la banda llegó a tocarla en vivo en el ’75 e incluso llegó a convertirse en un éxito para el músico y productor estadounidense Rick Derringer, con quien Merrill tocó en los 80s). Nuestro héroe no bajó los brazos: “A pesar del rechazo, Mickie dijo que iba por el buen camino, así que me puse a trabajar y compuse el estribillo de ‘I Love…’”, explica el autor. «Estábamos en Inglaterra, así que escribí ‘Put another coin in the jukebox, baby’ (N. ‘Poné otra moneda en la rockola, nena’). Pero Mickie me dijo: ‘No, en vez de ‘coin’ usá ‘dime’, porque sos estadounidense'». Al estribillo le seguían la estrofa, la música y el desenlace distintivos de la canción: «Básicamente trataba sobre una piba y un pibe que se conocen en una discoteca y se sienten atraídos; en mi arrogancia, creí que sería algo exitoso para The Arrows, y la referencia a una rockola fue mi propia broma personal».
TE ESTÁS PORTANDO COMO UN ROLLING STONE. Merrill, a pesar de todo, no laburó 100% solo en la canción: la verdad verdadera es que si bien creó la mayor parte, contó con ayuda de Hooker; ambos se inspiraron ligeramente en otro grupo de rockeros ingleses… ¿Un poco, mucho o un poco mucho? Merrill lo explicaba de esta manera: “Fue una reacción instintiva a ‘It’s Only Rock ‘N’ Roll’ de los Rolling Stones. Recuerdo haberlos visto tocarla en el programa televisivo Top Of The Pops. Había coincidido con Mick Jagger algunas veces, y sabía que se juntaba con el príncipe Rupert Lowenstein y todos esos jetsetters… Casi sentí que ‘It’s Only Rock and Roll’ era como una disculpa a esos príncipes y princesas del jet set con los que andaba – los aristócratas, vamos. Esa fue mi interpretación de joven: OK, me encanta el rock and roll. Y yo quería decirlo fuerte y claro”.
MERRILL EN LA DIMENSIÓN DESCONOCIDA. Con esa influencia en mente, era el momento de escribir el tema: “Primero tuve esa frase –‘I love rock and roll’- para el estribillo, que ya me sonaba como un hit. Y pensé, ‘voy a hacer algo realmente inusual’”. ¿Inusual en qué sentido, se preguntarán ustedes? Merrill amplía el concepto: la idea era que la banda creara una canción dentro de otra canción. En la letra, el estribillo estaría separado de la estrofa, sonando como si saliera de una rockola. “Y una parejita joven que está chapando en una disco escucha esa canción que es un hit”, detalló. “Parecía un episodio de la serie ‘La Dimensión Desconocida’… Estaba tan seguro de que ‘I Love Rock and Roll’ iba a ser un éxito para los Arrows que pensé, ‘Bueno, cuando este tema se convierta en hit, será un hit dentro de otro hit’. Un hit ficticio que sale del coro con los chicos cantándolo como su canción favorita en la estrofa de la canción, ¿me explico?». La explicación es ALGO compleja, pero el concepto no tanto. Al menos no lo fue para Merrill, que incluso tuvo un corolario para esta historia: “Así que cuando el tema se convirtió en un gran éxito para Joan Jett, mi concepto de la Dimensión Desconocida se hizo realidad. Y no creo que mucha gente entienda este aspecto de la canción. Simplemente les gusta la melodía y es pegadiza. Pero en realidad fue una idea ingeniosa, de la que estoy orgulloso”.

EL PASAJE MILLONARIO. Volviendo a la genesis del tema, con esa peculiar idea rebotando como la pelotita de un Flipper dentro de su cabeza, Merrill siguió adelante con la música y la letra, que compuso en su departamento de la Nell Gwynn House en el barrio londinense de Chelsea: “Compuse el riff, el solo de guitarra y las estrofas esa noche. Toqué la canción para Mickie con una guitarra acústica y me dijo que eso era exactamente lo que quería”… el camino estaba allanado. Pero -siempre hay peros y siempre hay detalles- aunque Merrill fue el principal compositor, Hooker recibió un crédito de coautoría a cambio de pagarle el pasaje de avión de Tokio a Londres en 1974. «Le di la mitad de las regalías de la cara B de los discos de Arrows, pero yo era el único compositor de todas las canciones», dijo Merrill. «Dado nuestro nivel de endeudamiento por gastos de grabación, anticipos y demás, pensé que nunca veríamos un mango, ya que todo se destinó a pagar nuestras deudas… La verdad es que Jake se sacó la lotería», concluía con resignación.
UNA CANCIÓN Y DOS VERSIONES. A pesar del alto concepto que Merrill tenía de la que hoy es una canción de fama universal, el productor Mickie Most no la consideró gran cosa y “I Love…” se lanzó en febrero de 1975 inicialmente como el lado B del single “Broken Down Heart”; el cantante explica su teoría al respecto: «Mickey estaba llegando al final de su carrera como productor, y el single tuvo una promoción lamentablemente baja», explicó Merrill, convencido de que merecía estar entre los tres primeros puestos del ranking, como mínimo. “Ese mismo mes Mickie también había producido ‘You Sexy Thing’ de Hot Chocolate, que es un temazo, y la puso como lado B con ‘Blue Night’ en el lado A. Así que claramente era su época de blues, cuando le encantaban las baladas”. Como fuere, la versión primaria de “I Love…” (que pueden escuchar arriba de este párrafo) presenta un sonido más pesado y turbio y no tuvo mayor suceso. El destino intervino unos meses después de la edición del single, cuando Christina Hayes, la esposa del productor, escuchó el tema y dijo que era demasiado bueno para ser una cara B. Most tuvo que aceptar que su esposa tenía razón: “Ella lo convenció de que pasara el tema a un lado A, lo que fue una gran suerte para nosotros: la canción no habría tenido la vida que tuvo si no hubiera sido por Christina”, admitió Merrill.
LA BANDA AVANZA A LA «A». Most apuró a la banda para volver al estudio y grabar una versión más potente, digna de un lado A. El single regrabado salió el 9 de mayo, aunque tampoco tuvo mayor promoción, por ende tampoco resultó un hit y al poco tiempo cayó en el olvido… Pero no sin antes abrirle una importante puerta a la banda: la televisión. “Gracias a la versión del lado A, nos tocó ir a la tele. Fuimos al programa ‘45’ que producía la famosa presentadora Muriel Young del canal ITV. Tocamos el tema y a Muriel le encantó; pensó que éramos tan buenos que deberíamos tener nuestro propio programa semanal. Casualmente, los Bay City Rollers (N. Banda escocesa de pop rock, muy popular en los 70s) iban a renunciar a su programa ‘Shang-a-Lang’ y se iban a enfocar en Estados Unidos. Muriel nos dijo: ‘Ustedes son quienes van a heredar el éxito de los Bay City Rollers’. Así que «I Love Rock and Roll» nos consiguió un programa en la tele”.
ROCKEROS DE LA PANTALLA CHICA. Apropiadamente titulado “Arrows”, el programa -que se emitió en ITV a partir de marzo de 1976 para todo el Reino Unido, y tuvo 28 emisiones- tenía un formato simple: que la banda interpretaba sus propias canciones y presentaba a diversos artistas invitados, entre los que figuraron importantes nombres como Marc Bolan (T. Rex), los ya mencionados Bay City Rollers, The Drifters, Gilbert O’Sullivan, Alvin Stardust, Gene Pitney, Slade y muchos más. Durante la segunda temporada, la banda incorporó a un cuarto miembro, el guitarrista Terry Taylor, a quien conocieron por intermedio del bajista de los Rolling Stones, Bill Wyman (luego Taylor tocaría en Rhythm Kings, la banda blusera de Wyman). Las cosas parecían ir viento en popa para el ahora cuarteto, pero el programa planteó una notable paradoja: Arrows se convirtió la única banda en la historia de la música pop que tuvo una serie de televisión semanal propia sin tener ningún álbum (!). Esta inusual situación se debió a diversos problemas que venían de arrastre.

SIN ÁLBUMES PERO CON PROBLEMAS. “Aunque tuvieron un par de éxitos con bandas como Cockney Rebel y Hot Chocolate, hay que decir que ‘I Love…’ fue la canción con mayores ingresos para la RAK Records. Pero aunque le haya dado las mayores ganancias, a Mickie Most no le gustaba mucho, posiblemente porque tenía un problema con nuestra banda”, explicaba Merrill. Es que las cosas habían cambiado en aquel lejano 1975, no necesariamente para bien: “Habíamos publicado tres singles, dos de ellos hits, y estábamos sintiéndonos a nuestras anchas. Eso se notaba en nuestra forma de entrar en la oficina, en nuestra actitud general, y a Mickie no le gustaba. Le gustaba la humildad, que nadie se la creyera. Jake Hooker estaba empezando a salir con Lorna Luft (N. Actriz y cantante estadounidense, hija de la famosa Judy Garland), así que iba a todos los estrenos exclusivos de películas y cosas así. Mientras, Paul Varley empezó a salir con June Bolan, la ex de Mark Bolan. Y estalló una especie de guerra entre esas dos mujeres”.

LAS FLECHAS Y LOS DARDOS. Por supuesto, el clima interno en la banda se tornó espesísimo. “Cada vez que salíamos de gira o hacíamos el programa, las dos minas estaban a ambos lados de la sala lanzándose dardos con la mirada. Por entonces yo estaba soltero, y pensé: ‘esto es lo último que necesitamos’… Y eso fue lo que alejó a Mickie de la banda, la pomposidad. Pensábamos que nuestro manager podría obligarlo a sacar nuestro disco, pero se dejó intimidar por Mickie y su socio, Peter Grant (N. el famoso manager de Led Zeppelin). Como resultado, tuvimos un show de televisión sin discos publicados. La gente nos decía: ‘Tuvieron su propio programa en la tele y no tuvieron ningún hit’… Bueno, no podés tener hits si no publicás nada. Así fue como Mickie castigó a la banda, por faltarle el respeto”. Tras largas negociaciones y discusiones, los Arrows llegaron a sacar un disco al año siguiente, titulado “First Hit”, pero ese primer golpe sería el último, ya que el destino estaba marcado: como resultado de sus problemas comerciales y personales, la banda se separaría en 1978 y sus miembros seguirían sus vidas y carreras por distintos caminos. Parecía un final sin pena ni gloria ni mucho para el recuerdo… pero el destino siempre tiene la última palabra.

YO SOLO QUIERO SER DEL JETT-SET. El programa de televisión también fue decisivo para atraer a otro personaje clave en la historia de esta canción: hablamos de Joan Jett, por entonces guitarrista de la banda femenina estadounidense The Runaways. Merrill explica la conexión: “En 1976, cuando Joan Jett estaba de gira con The Runaways por primera vez en Inglaterra, nos vio tocando ‘I Love…’ en nuestro programa, y entonces salió corriendo a buscar el disco y más adelante grabó un cover”. La ex guitarrista de The Runaways tuvo un amor a primera vista (o escucha) con la canción, pero sus compañeras de banda no quisieron grabarla. Jett esperó el momento adecuado y, ya como solista, grabó una primera versión en 1979 junto a los ex Sex Pistols Steve Jones y Paul Cook, lanzándola como cara B de su single «You Don’t Own Me”. Pero no le fue bien. “No tuvo suerte; la puso como lado B”, comenta Merrill. “Entonces, ¿qué probabilidades hay de que alguien reedite una canción fallida? Muy pocas. Pero la reeditó en 1981 como Joan Jett and the Blackhearts, y esta vez llegó al número uno. Así que la canción ha tenido un recorrido extraño, como mínimo. Recuerdo que me encontraba en el estudio grabando el álbum de mi proyecto The Runner (N. junto al productor de Pink Floyd, James Guthrie) cuando ella estaba con Cook y Jones en la sala de al lado. Y ni siquiera sabía que estaba grabando «I Love…».
LA HORA DE LAS CHICAS. Merrill se había unido a la banda de Rick Derringer cuando la segunda versión de Jett (la de Jones/Cook no se lanzó hasta 1993) triunfó. Sus caminos se cruzaron de nuevo durante una gira por Florida; según recordó Merrill en otro reportaje de 2013, «‘I Love…’ estaba en alza en las listas de éxitos y Joan me dio un abrazo. Hablamos de la gran posibilidad de que se convirtiera en un hit. Le dije que era una Arrow honoraria porque se parecía a uno de nosotros. Ella siempre me gustó y forjamos una amistad informal. Desde entonces, ha sido una parte importante de mi vida y yo de la suya, lo admita o no». La versión de Jett supuso un cambio lírico con respecto a la original, donde los Arrows narran la típica historia de un chico que seduce a una chica y la lleva a casa. En un giro de 180º, la Jett es quien persigue al chico; en tono decidido, segura de sí misma y sexualmente libre, gruñe estas palabras sobre un fondo de rock tan duro como ganchero: “Lo vi bailando junto al tocadiscos / Supe que debía tener unos diecisiete / El ritmo era fuerte / Sonaba mi canción favorita / Y supe que él no tardaría en estar conmigo, sí, conmigo”… La canción se convirtió en un himno al empoderamiento femenino y Jett se convirtió en una inspiración para muchas futuras rockeras.
ORIGINAL VS. COVER. Cabe destacar que en las cuatro décadas transcurridas desde que Jett prácticamente se apropió de «I Love Rock ‘N’ Roll», muchas compilaciones han acreditado erróneamente la canción como de su autoría. Para mayor confusión, a veces también se cuenta como autores a Allan Sachs y Jerry Mamberg… que son los verdaderos nombres de sus compositores, Merrill y Hooker (!). A esto se suma que Merrill se sentía algo frustrado porque la Jett parecía fomentar la percepción de que ella escribió la canción. Un video que se popularizó en YouTube la muestra en un reportaje donde no corrige al entrevistador que asume que fue ella quien escribió la canción. Y en la película biográfica de 2010, «The Runaways», el tema pareciera caer del techo de su habitación directo a la cabeza de Kristen Stewart, quien interpreta a la Jett con gran precisión visual… «Los mitos que han tejido me dejan atónito, sobre todo ese», se lamentaba el ex Arrow. «Como productores ejecutivos de la película, Joan y [su manager] Kenny Laguna tenían carta blanca para representar esa situación como quisieran». La controversia en torno a la canción desencadenó una batalla legal que duró varios años. Finalmente, Merrill y Jett llegaron a un acuerdo, cuyos detalles nunca se hicieron públicos (aunque se cree que Merrill recibió parte de las regalías de la versión de Jett). A pesar de esto, el cantante de los Arrows se enorgullecía de que una canción que escribió se hubiera convertido en una de las favoritas del rock de todos los tiempos. «No me hice rico con ‘I Love..’ hasta que Britney Spears la versionó [en 2002]», reveló. «Sin embargo, que mi visión se hiciera realidad fue grandioso».
EL COVER DEL COVER DEL COVER. Yendo al aspecto monetario, no bien se editó el cover de los Blackhearts rápidamente se convirtió en un éxito rotundo, manteniéndose en el número 1 del Hot 100 durante siete semanas, lo cual reportó notables ganancias no solo a la Jett sino también a los Arrows, que desde 1981 a la fecha siguen cobrando las regalías. Una suerte de final feliz, digamos, sobre todo teniendo en cuenta que muchos artistas han hecho su propia versión del tema, entre ellos las popstars Britney Spears y Miley Cyrus, los peculiares hardrockeros-bluegrasseros Hayseed Dixie, el productor y DJ italiano Alex Gaudino, el comediante musical Weird Al Yankovic y los rockeros californianos L.A. Guns. Según Merrill, aunque le encanta la versión de Jett, no es su favorita: «Creo que Joan hizo un gran trabajo, pero quizás mi favorito es el cover de L.A. Guns… Hay tantas versiones que probablemente ni siquiera he escuchado la mitad, ¡pero me alegro de haberla compuesto!».

EL CUARTO DE HORA MÁS VALIOSO DEL MUNDO. La ironía de haber éxito a través de otra gente no le es indiferente a Merrill, quien dejó una interesante reflexión en aquel reportaje que mencionábamos al inicio de este informe: “Jake solía decir que le tomó 15 minutos escribir ‘I Love Rock ‘N’ Roll’, lo cual me molestaba mucho”, dijo Merrill. “Esos 15 minutos fueron el tiempo que tardé en enseñarle a tocarla. Pero a medida que he crecido, he adoptado un enfoque más filosófico. La vida tiene sus propias maneras de resolver las cosas, y supongo que si las cosas no hubieran resultado como resultaron, Joan podría no haber escuchado la canción, no haber tenido el éxito, y yo no tendría la vida que tengo ahora. Creo que la canción ha recaudado unos 50 millones de dólares hasta la fecha en regalías mundiales. Considerando que el pasaje de avión le costó a Jake mil dólares, obtuvo una ganancia bastante buena”... Alan Merrill falleció en 2020. Pero durante sus años tocando en vivo con The Arrows, no podía dejar de interpretar «I Love Rock ‘N’ Roll». «No me canso de ella, porque nunca canto una canción igual dos veces», explicaba entre risas. «He tenido una carrera muy peculiar, y eso se refleja en mi show».

BONUS: Para finalizar esta historia a toda música, les dejamos la letra de la canción y algunos covers que, por un motivo u otro, vale la pena escuchar… si es que aman al rock and roll, claro está.
I saw him dancin’ there by the record machine
I knew he must’ve been about 17
The beat was goin’ strong
Playin’ my favorite song
And I could tell it wouldn’t be long
‘Til he was with me, yeah, me
And I could tell it wouldn’t be long
‘Til he was with me, yeah, me, singin’
«I love rock ‘n roll
So put another dime in the jukebox, baby
I love rock ‘n roll
So come and take your time and dance with me»
Ow!
He smiled, so I got up and asked for his name
«That don’t matter», he said, «‘Cause it’s all the same»
Said, «Can I take you home where we can be alone?»
And next, we were movin’ on, he was with me, yeah, me
Next, we were movin’ on, he was with me, yeah, me, singin’
«I love rock ‘n roll
So put another dime in the jukebox, baby
I love rock ‘n roll
So come and take your time and dance with me»
Ow!
Said, «Can I take you home where we can be alone?
Next, we were movin’ on, he was with me, yeah, me
And we’ll be movin’ on and singin’ that same old song
Yeah, with me, singin’
«I love rock ‘n roll
So put another dime in the jukebox, baby
I love rock ‘n roll
So come and take your time and dance with me»
I love rock ‘n roll
So put another dime in the jukebox, baby
I love rock ‘n roll
So come and take your time and dance with-
I love rock ‘n roll
So put another dime in the jukebox, baby
I love rock ‘n roll
So come and take your time and dance with me
Periodista especializado en artes, espectáculos, gastronomía y cultura pop. Co-fundador de las revistas argentinas Riff Raff (entre 1985-86) y Madhouse desde 1989 hasta 2001. Director del primer fanzine de habla hispana dedicado a Kiss y autor junto a Carlos Parise del libro «Heavy Metal Argentino» (1993).








