
Desde el comienzo de una trayectoria que lleva ya más de dos décadas, Azeroth alzó la bandera del power metal para no soltarla nunca y constituirse en el mayor referente local del estilo. Con un nuevo disco «Senderos Del Destino» bajo el brazo, la banda se prepara para un 2023 cargado de mucha actividad en escena, que incluye compartir cartel con algunos pesos pesados internacionales en sus visitas al país, como sucederá junto a Angra el próximo 4/3. Para hablar sobre el presente, pero también sobre el pasado y futuro de Azeroth, MADHOUSE contactó a su fundador y bajista Fernando Ricciardulli, y a continuación te dejamos con las palabras y los hechos.
El 2023 parece ser un año muy activo para Azeroth. Empecemos por lo más próximo. ¿Cómo vivieron la presentación en el Union Metal Fest?
Este año viene a full para nosotros. El domingo pasado fuimos parte del festival en un lugar muy lindo como es El Encuentro Club en San Justo, en el cual ya habíamos tocado antes. Pudimos llevar nuestra propuesta y mostrar material de nuestro nuevo disco, “Senderos Del Destino”.Fue lindo tocar con amigos como Lethal, Against, Plan 4, Arde La Sangre y Serpentor, pero también darle la chance de mostrarse ante el público a bandas hermanas de América Latina. Teníamos muchas ganas de estar porque creemos que es el festival de metal más importante de la Argentina. Al toque vamos a tener la chance de tocar en Groove con Angra, recinto en el cual nunca habíamos podido presentarnos. También el 26 de abril vamos a estar tocando con Stratovarius en El Teatro de Flores. Son todas muy buenas oportunidades para Azeroth, poder mostrar nuestra propuesta en vivo. Para nosotros estos eventos internacionales son una gran vidriera. También vamos a estar en esta primera parte del año tocando en el conurbano, y el plan para el resto de 2023 es poder ir al interior. A veces se complica porque la figura del productor en nuestro medio está en vías de extinción, entonces nadie apuesta para mover a una banda, con lo que eso significa porque son gastos que tiene que afrontar uno. Ojalá se dé esa posibilidad. Tampoco está fuera del radar Latinoamérica, tal vez participando de algunos festivales. Y por último, la fecha estelar de este año va a ser en septiembre u octubre, que será la presentación oficial de “Senderos…”. Nos falta confirmar la fecha exacta y el lugar.
Siguiendo con la agenda de la banda, qué expectativas tienen para el show con una banda tan importante como Angra?
Es buenísimo tener la posibilidad de compartir escenario con bandas como Angra, que tienen una larga y exitosa trayectoria, además de un nivel artístico muy alto. Por eso lo vemos como un reconocimiento para Azeroth, ser tenidos en cuenta para estar tocando con ellos. Vamos dispuestos a dar lo mejor de nosotros porque es una chance de mostrarnos frente a un público que por ahí no es de ir a ver bandas nacionales. Es una buena manera de captar nuevos oyentes. Ellos son una de las grandes bandas de power metal, sus tres primeros discos fueron de una gran influencia para mí, así que es un halago estar haciendo la fecha el 4 de marzo en Groove (Av. Santa Fe 4389/ entradas en venta en www.passline.com)
Hablemos un poco del nuevo disco, “Senderos del Destino”(2022). ¿Cómo fue grabarlo, qué dirección artística quisieron darle al álbum?
Lo lanzamos el 14 de octubre pasado y la verdad estamos muy contentos con el resultado final. Nos dimos el gusto de que tenga una edición física, que estuvo a cargo de la gente de Cuervo Records, a quienes considero el único sello que trabaja de manera profesional en el país. Y en cuanto al proceso de composición, te puedo contar que comenzó en plena pandemia. Hicimos un show en marzo en El Teatro de Flores y a los pocos días empezó el confinamiento.
Me imagino que la pandemia debe haber alterado los planes iniciales en cuanto a composición y grabación?
Totalmente. Si bien estaba pautado entrar al estudio, el no poder hacer shows y parar aceleró todo el proceso. Lo que tuvo de bueno, esto dicho entre enormes comillas, es que nos dio más tiempo para trabajarlo al disco, sobre todo la parte orquestal, y hacer con Nacho Rodríguez (voz), un trabajo de pre producción muy copado. Es la primera vez que comparto la composición con un compañero de banda. Hicimos “El Último Viaje” y “Antigua Senda” juntos. Además hay un tema que se llama “Urd”, que está basado en la mitología nórdica, y lo trabajamos sobre una idea que trajo Leo Miceli, nuestro tecladista. Nacho también fue el encargado de producción y de mezcla. Trabajamos muchísimo y le pusimos mucho cariño. Produjimos dos videoclips de los temas «Senderos del Destino» y «Exiliado». Lo mismo con respecto al arte del disco de la cual me ocupé yo. Digamos que todo quedó en casa (risas).Dentro de algo poco feliz como fue el covid, encontramos la posibilidad de trabajar todo lo relacionado con el disco al detalle. Tené en cuenta además, que ninguno de nosotros vive de la música, con lo cual en una situación de normalidad hay que repartirse entre el trabajo y la banda, y se complica.
¿“Senderos…” va a tener una versión cantada en inglés cómo ocurriera con el anterior, “Más Allá Del Caos” (2018)?
No creo que esta vez lo hagamos. De haberlo hecho debió salir a la par de la versión en castellano. Se dificulta mucho el trabajo de promoción, tenés que promocionar cada versión para mercados muy distintos y numerosos.Esta vez dijimos “el que mucho abarca poco aprieta”. Lamentablemente, las compañías van a lo seguro, no se juegan por otra cosa que no sea lo que les da de comer, entonces hacer el disco en inglés definitivamente no. Alguna canción para promoverlo podría ser una opción. También está el tema de que a nosotros nos hace ruido cantar sólo en inglés, queremos que la gente de acá pueda entender fácilmente el mensaje y que se identifique con cuestiones que nos atraviesan a todos como individuos.
Azeroth está transitando una nueva encarnación después de un largo paréntesis. ¿Qué motivos los llevaron a separarse en su momento y cuáles a volver a darle vida a la banda?
El paréntesis que mencionás fue en el 2002, en un momento importante de la banda, con nuestro primer disco editado en varios países como Japón, México, Chile y España, país este último en el que decidimos radicarnos. Tengamos en cuenta que veníamos del desastre del gobierno de De La Rúa, el país estaba explotado. Nos jugó en contra la juventud y la inexperiencia. Hubo un problema personal con Diego Valdéz, nuestro cantante de entonces, la banda se disolvió y yo viví más de diez años repartidos entre Italia y México.Estando en el exterior se me hizo complicado rearmar Azeroth. Hubo un intento en 2010 con el disco “Historias y Leyendas”, con la idea de armar una nueva encarnación de la banda con músicos de México, que era donde residía, pero no funcionó.Así que Azeroth quedó en el freezer hasta que volví en el 2016 al país.En su momento, cuando la banda se desmembró fuera del país, sentí que me habían dejado con el sueño a cuestas. Por suerte, cuando pegué la vuelta, en poco tiempo encontré a un excelente batero como Dani Esquivel, enseguida se incorporaron Nacho Rodríguez en voces y guitarra, Pablo Gamarra, que ya había estado en el grupo, en la otra viola y finalmente Leonardo Miceli en teclados.
¿Cómo encontraron a la escena local cuándo encararon el regresó? ¿Cuáles son los avances y cuáles los retrocesos?
En cuanto a la escena, la encontramos devastada en ciertos aspectos, pero seguimos dándole para adelante y con los mismos sueños, con ganas de seguir haciendo cosas por nosotros y por la gente. La verdad que el público nos acompañó, tanto los que nos escuchaban en nuestra primera etapa como los nuevos oyentes que se sumaron. Hubo un recambio generacional también. Lo que sí encontré como positivo es un mayor grado de profesionalismo y también más y mejores lugares para tocar. El metal hoy en la Argentina se volvió muy de nicho, y a veces la gente es medio reticente a seguir bandas locales.Por eso nos interesa tocar con bandas de afuera, para demostrarle a ese público que acá hay bandas que están a la altura y que merecen mayor atención.
Azeroth se destacó siempre por tener vocalistas de peso como Barilari, Valdéz y Bertoncelli. Me imagino que no debe haber sido fácil buscar un cantante que llene esos zapatos. ¿Cómo dieron con el actual vocalista, Ignacio Rodríguez?
Fue por recomendación. Nos pasaron el contacto de Nacho y empezamos a probar. Enseguida vimos que había dos cosas fundamentales que estaban presentes :afinidad en lo artístico y buena relación humana y profesional. Quienes hayan tenido oportunidad de escucharlo en vivo saben que está a la altura del material anterior, pero además aporta ideas en lo compositivo. La verdad que estoy muy feliz con esta formación y el presente de Azeroth. Lo que más nos gusta en la vida es estar sobre un escenario haciendo música y nos sentimos unos privilegiados de poder hacerlo.

¿Siendo referentes nacionales del power metal, cómo ven la actualidad del género no sólo a nivel local, sino también en el plano internacional?
Lo de referente me suena a señor mayor, por no decir viejo (risas). Obviamente el estilo tuvo su apogeo a fines de los 90s, justo cuando nosotros salíamos.Hoy el género no es tan popular y como pasa en general con el rock, no han surgido bandas más nuevas importantes. Fijate que estamos tocando con Stratovarius y Angra que tienen 30 años de carrera.Bandas salen todo el tiempo, pero para mí el problema es que la oferta está totalmente saturada. Creo que la vuelta de Helloween con los miembros históricos generó un revival del power metal, pero hay que ser sincero y decir que es un estilo mucho más popular en otros lugares del mundo que acá. Sin ir más lejos, Chile por ejemplo, nos saca ventaja en ese aspecto también.
Para terminar, y hablando de otros mercados, ¿tienen pensada alguna proyección internacional de la banda a futuro?
-Siempre está la idea de proyectarse a nivel internacional. No cierro la puerta del todo pero lo veo complicado hacerlo en el primer mundo. El tema del idioma sabemos que es una barrera, pero también el hecho de estar en el culo del mundo. El mercado dónde mejor funciona lo nuestro es el europeo Hay una sobreexposición de bandas que dificulta hacerse conocido. Tal vez encontrar algún sello europeo que se interese, pero por la distancia geográfica tienden a elegir bandas de países más centrales.Al margen de eso, hay países latinoamericanos donde sí puede funcionar nuestra propuesta. Como te decía, en Chile, pero también Perú, Colombia. La idea de seguir creciendo siempre está.

Porteño, cincuentón, melómano, cinéfilo, amante del whisky y la cocina. Licenciado en comunicación, fue agente de prensa en organismos públicos, se desempeñó como productor e investigador periodístico en Arte Canal y participó como redactor de los suplementos “No” y “Turismo 12” de Página/12 y de la versión impresa de Madhouse. Como Do Carmo, baterista frustrado, padre de dos rubias y hombre librepensador.