PACIENTE: BOOMTOWN RATS – «Citizens Of Boomtown» (BMG, 2020)
HISTORIA CLÍNICA: 2020, seguimos viviendo en 2020. Uno no puede evitar haber llegado a cierta edad y no puede asimismo evitar haber vivido lo que vivió y escuchado lo que escuchó. En relación a este último punto, uno no puede evitar amar a Bob Geldof, quizá por su papel en la película «The Wall», por sus intentos de ayudar al prójimo con Live Aid, por razones varias que combinan el agredecimiento, el placer y la nostalgia. Pero sería más exacto decir que uno ama a Bob Geldof por el tema «I Don’t Like Mondays» y por todo lo que escribió y cantó durante la experiencia de Boomtown Rats. Más allá de todo esto, volviendo a MMXX, la vida continúa incluso para Bob: hay que pagar las facturas, la hipoteca de la casa, el supermercado o los gastos que fuere que tenga a esta altura de su vida; quizá por eso, luego de una breve gira de reencuentro hace siete años, este año surgió la decisión para los Boomtown Rats de volver a grabar un puñado de canciones inéditas con la formación original (esto es Geldof, el bajista Pete Briquette -que también produjo este disco-, el batero Simon Crowe y el guitarrista Garry Roberts). Uno ha querido mucho a Bob y sí, lo sigue apreciando, en especial al recordar algunos logrados intentos solistas; no obstante, al saber de este disco las suspicacias se despertaron y el aroma a negocio del tipo hagamos-otro-disco-aunque-no-tengamos-muchas-ganas-a-ver-si-rascamos-unos-mangos se volvió un tufo reconocible.
Con todo, poco nos faltó para cambiar esta última opinión, porque «Citizens Of Boomtown», el séptimo álbum de estudio de esta banda irlandesa (y el primero desde 1984, oigan), se sostiene sobre sus propias piernas hasta la mitad de la obra. El eficaz híbrido Bowie / Bolan en «Trash Glam Baby» es sin dudas más logrado que lo que hacen muchas bandas jóvenes y actuales que de algún modo se ven perdidas en la traducción; «Sweet Thing» incluye uno de esos riffs nirvanianos buenos para cualquier generación; «Monster Monkeys» se mueve mezclando estructuras típicamente clásicas del rock; «She Said No» se centra en el blues rolinestonero, y por supuesto el álbum no carece de la balada delicada e hiper-melancólica, llamada «Passing Through» en esta ocasión. Aún así, la esperanza de que este album pudiera ser un trabajo completa y sinceramente exitoso fue una sensación efímera, esfumada lenta y dolorosamente en una segunda parte con varias caídas de tensión.
El esfuerzo por introducir un insert rapeado no le quita a «K.I.S.S.» su approach festivo y popular; el estribillo de «Rock’n’Roll YéYé» es un remanido y tipiquísimo himno de estadio; «Get A Grip» es un rock alienante, con el único mérito de incluir toques de música electrónica para dar cierta variedad. Lo triste es que también resulta insípido -e insignificante casi- el forzado final con «The Boomtown Rats», en el que Geldof y el resto de la banda intentan parecerse a Primal Scream, dejando en claro de modo ultra-evidente cómo ciertos yeites pueden funcionar cuando son pergeñados por tipos que podrían ser sus nietos.
DIAGNÓSTICO: Levantando un poco el pie del acelerador, no todo es descartable en «Citizens Of Boomtown»: a lo largo de tantos años uno ha visto retornos mucho peores, y a pesar de lo que uno se imagine lo más probable es que Geldof y compañía se habrán divertido mucho, dicho esto sin ningún sarcasmo, grabando estas diez pistas… Pueden darle la oportunidad y ver qué les parece. Mientras, uno seguirá apreciando a Sir Geldof por todas las cosas buenas que ha logrado en el pasado, también en el ámbito social y humanitario, y por la valentía de regresar, a pesar de todo.
Periodista especializado en artes, espectáculos, gastronomía y cultura pop. Co-fundador de las revistas argentinas Riff Raff (entre 1985-86) y Madhouse desde 1989 hasta 2001. Director del primer fanzine de habla hispana dedicado a Kiss y autor junto a Carlos Parise del libro «Heavy Metal Argentino» (1993).